Conecta con nosotros

Opinión

Opinión: Sí es corrupción, pero poquita, por Diana Avitia

Desde el momento en el que se filtraron videos donde se muestra a Pio López Obrador recibir efectivo de dudosa procedencia, la guerra de grabaciones quedó abierta, y en apariencia desapareció el supuesto pacto de impunidad entre Peña y AMLO, este acuerdo o especie de complicidad política que todos pensábamos inquebrantable, dejo de serlo. A partir del caso Lozoya tenemos la impresión que el pacto de impunidad quedo roto.

AMLO siente que su palabra, siendo el presidente, absuelve de cualquier culpabilidad, él afirma que era consciente del traspaso de dinero, eso es un delito, es increíble como la verborrea y letanías mañaneras pueden tergiversar lo irrefutable, el mandatario afirmo a parte de sus clásicos de siempre; mis opositores, los conservadores, los malos, bla bla, que tal conducta estuvo justificada porque iba a su causa, tal idea es totalmente errónea, su confesión fue en plena conferencia matutina, ¡por el amor de dios!, el abiertamente afirma que hubo un flujo de dinero constante a una cuenta de Banorte y beneficios económicos en pro de su partido, por el otro lado acusan a Odebrecht de un financiamiento ilícito de los opositores, increíble.

La ley es clara, cualquier dinero que se destine a un partido político sin declararlo al Instituto Nacional Electoral (INE), sin importar origen o destino es ilegal, entregarlo, aceptarlo y utilizarlo es un delito, poco o mucho no tiene importancia, bueno la tiene en función de la pena a purgar en caso de comprobarse y sentenciarse el ilícito. No es novedad, este tipo de financiamiento es un clásico de la política mexicana, es imposible no ver el elefante rosa en la habitación.

Hoy tenemos un cambio absoluto de discurso, fue increíble; Leona Vicario, Madero y Flores Magón, repentinamente surgieron nombres e imágenes de héroes nacionales, para justificar el video de Pio López Obrador, al mas maquiavélico estilo, el fin justifica los medios, siempre y cuando sean sus fines y causas, claro esta, los fines y causas de los opositores esas son espurias, injustificables, señaladas y dignas de persecuciones judiciales y políticas.

Hay miles de razones por la que el dinero ilegal entra a campañas políticas, ya que el INE no admite ciertos gastos como; encuestas, compras de tiempos en medios, cierto tipo de reuniones, esto se diga o no es parte de la trama electoral. No puedes gastar dinero legal para un gasto ilegal, necesitarías en todo caso efectivo de origen no legal para subsanar gastos no contemplados en la ley. También existen miles de fugas de dinero en las campañas, la operación política está plagado de ventajosos que toman el dinero, nunca llegan a los operadores, con la justificante de ladrón que roba a ladrón, por todo lo dicho es comprensible como el hoy funcionario federal que entrego en el 2015 ese dinero al hermano del presidente tuvo que auto grabarse para asegurar a sus superiores que sí se entregó el efectivo, en fin, novela política.

Hoy el argumento es, que por su gran y enorme valor moral el presidente puede eximir a sus cercanos, cambiando el nombre de soborno por aportaciones, con eso quedo el asunto resuelto, y de una conducta delictiva se transforma por milagro de los héroes del pasado y las santas manos del ejecutivo en un acto de nacionalismo puro operado desde el Sanborns.

La confesión a nivel nacional de un delito es inaudita, afirmando que el dinero era destinado para sustentar al partido hoy en el poder, pero va mas allá, y justifica que en ese año no se ganó nada, entonces pues ese dinero no tuvo injerencia en la elección, como si esto fuera una justificación valida.

La retórica usada por el presidente es impecable, destinada a un blanco específico, le sigue hablando exclusivamente a su electorado, les dice lo que quieren escuchar, aun sean las más absurdas de las justificaciones, él las canta de la forma más agradable para su gente, el pueblo bueno le dicen.

Ya arrancó la cruenta guerra de videos, ¿quién tendrá más grabaciones?, eso solo el tiempo lo dirá. Solo podemos suponer que el gobierno federal si tuviera en su poder más videos, ya los hubiera sacado a la luz, en plena mañanera, inmediatamente después filtrado el video incriminatorio de su hermano, en aras de absolver, y bajo la premisa de; robar poquito es mejor, ¿hasta donde los heridos por la aparente caída del pacto político entre la actual administración y la pasada frenaran sus ganas de venganza?, y lo más importante ¿cuantos videos tendrán en sus manos?, no sería sorpresa que aun existieran muchos otros de cercanos al presidente, la 4t atacara desde el púlpito presidencial nuevamente o ya entendieron el mensaje.

Muchos afirman que esta violación al pacto hoy confirma la unión absoluta de la oposición y descarta de facto al PRIMOR, vienen cosas impensables, lo único que fue claro, quieran verlo o no, es que hoy la 4t paso de tener su falsa mascara de Robespierre, tiranos pero incorruptibles, a dejar bajo la más clara luz la cara de la peor pesadilla del presidente.

Escribe tu comentario

Comentarios

Continuar Leyendo
Publicidad Caleb Ordoñez 

Opinión

La valentía de ser uno mismo. Por Itali Heide.

La mayoría de los días, odio mi cuerpo. Algunos días aparece como un disgusto pasivo, mientras empujo las inseguridades que viven dentro de mí a un segundo plano. Otros días, consume mi mente. El aspecto de cada uno de mis rincones me atormenta los días en los que no soy capaz de mirar más allá del físico de mi existencia.

Es especialmente difícil cuando me considero feminista y positiva con respecto al cuerpo. ¿Cómo puedo apoyar y amar el cuerpo de los demás y, sin embargo, encontrar espacio para odiar el mío? Parece casi hipócrita, pero no puedo encontrar la manera de evitarlo.

Me levanto por la mañana y decido que hoy me voy a querer a mí misma. Me ducho, me maquillo, me pongo un atuendo con el que me sienta feliz y luego pierdo toda la confianza en mí misma cuando me veo en el espejo. Tal vez tenga algo que ver con el hecho de que he ganado más de un kilo desde la cuarentena. Pero lo más probable es que tenga que ver con el hecho de que seguimos siendo bombardeados con estándares imposibles a los que nos hacemos responsables, incluso cuando no exigimos a los demás el mismo estándar.

No todos los días son así. A veces, mi maquillaje se ve justo como quiero. Mi outfit parece haber sido elegido por un estilista. La confianza en mí misma se dispara en esos días, aunque son poco frecuentes. En esos días, aprovecho al máximo lo que soy. Quién sabe, quizá en los días malos recuerde quién era cuando me sentía yo misma.

Al fin y al cabo, cuando más nos sentimos como nosotros mismos estamos contentos con nuestro aspecto, ¿no? Ni siquiera tiene una correlación con el físico, pero impacta directamente en la forma en que nos sostenemos y nos sentimos cuando entramos por la entrada de algún lugar. Parece que pensamos que todo el mundo es perfecto. Nos fijamos en lo que no tenemos en los demás, e ignoramos lo que sí tenemos cuando los demás no lo tienen. Parece ser la naturaleza humana, pero me gusta creer que nos hemos enseñado a pensar que la perfección es la única forma de ser.

Los estándares de belleza han existido desde que la humanidad ha dado valor a la apariencia de las personas (especialmente a la mujer). El poder que tiene sobre nosotros es asombroso, sobre todo si tenemos en cuenta que hemos borrado el cuerpo humano natural de la existencia y lo hemos sustituido por un cuerpo de modelo que se supone que representa la mejor versión de nosotros mismos. La verdad es que la mejor versión de nosotros mismos no necesita dietas, ejercicio excesivo, photoshop, filtros y poses incómodas.

¿Qué necesita realmente la versión auténtica de nosotros mismos? Necesita correr, explorar, tocar, sentir, llorar, reír, aprender y ser libre. Nuestro cuerpo está hecho para mucho más que para convertirse en una estatua de los estándares de belleza, y a menudo nos olvidamos de ello. Nos negamos a salir de nuestra habitación sin maquillaje, sin un atuendo que nos haga sentir seguros, sin algo que cubra la autenticidad que nos hace ser quienes somos.

Quien eres, es quien estás destinado a ser. Si quieres ponerte delineador de ojos, adelante. Si quieres llevar capa y vestido, hazlo. ¿Quieres ir al gimnasio y ponerte musculoso? Nadie te lo impide. La vida es un juego y tú eres el avatar que tienes la suerte de personalizar. Sin embargo, no olvides que eres igual de valioso sin todas esas cosas. El mundo está hecho para ser disfrutado, y nada superficial te dará las herramientas necesarias para sentirte realmente feliz en el mundo. Sé tú mismo, pero no olvides que eres más que lo que aparentas ser.

Escribe tu comentario

Comentarios

Continuar Leyendo

Opinión

El precio caro de la moda barata, Por Itali Heide

La vida moderna en la era del hipercapitalismo está llena de daños medioambientales inevitables – desde viajar en avión, los plásticos de un solo uso, hasta los pedidos de comida a domicilio – la contaminación parece ser algo natural para nosotros en esta época. Cuando se trata de la ropa que usamos, a menudo los impactos son menos que obvios.

La industria de la moda produce el 10% de todas las emisiones de carbono de la humanidad, lo que le ha valido ser de los mayores consumidores de agua y contaminar los océanos de la Tierra con peligrosos microplásticos, que acaban en nuestras playas y llegan al interior de los cuerpos de las criaturas que llaman al mar su hogar. La industria que nos ha mantenido al tanto de los trends en el mundo de la moda es el segundo mayor contaminante del mundo, solamente detrás de la industria petrolera. Entre más crece la industria, el daño medioambiental empeora de forma exponencial, también.

A medida que los consumidores alrededor del mundo compran más ropa, especialmente de empresas de fast fashion barata cuya popularidad no deja de aumentar, como Shein, Fashion Nova y Zara, por nombrar sólo algunas, el peaje para el medio ambiente se hace notar. La gente no sólo compra más del doble de ropa que a principios del milenio, sino que además conserva la ropa la mitad de tiempo.

Las tendencias cambiantes y la necesidad constante de validación alimentan la necesidad de comprar más y más, lo que conduce a una relación tóxica entre el consumidor y la empresa. Cuanto más compramos, más sufre el mundo y más validamos a las empresas que se aprovechan de nuestras inseguridades y de nuestra necesidad de impresionar constantemente.

La industria textil y de la moda tiene una cadena de suministro larga y compleja, que empieza en la agricultura y la producción petroquímica, hasta la fabricación, la logística y la venta. Cada proceso conlleva su propio conjunto de pesadillas, ya sea el impacto medioambiental o humano, ya que la industria explota a miles de personas en países de bajos ingresos por unos pocos centavos. Los impactos vienen en todas las tonalidades del arcoiris, empeorando a medida que el mundo sólo continúa por su camino orientado al consumo, en lugar de tomar las medidas necesarias para mejorar el futuro de la industria.

Entonces, ¿qué se puede hacer para frenar la contaminación? Puede que sea demasiado tarde para borrar todo el daño causado, pero nunca es demasiado tarde para mejorar. La moda sostenible es la respuesta, pero es un término que se utiliza cada vez más (y de forma exagerada) y que no suele estar respaldado, ya que las empresas prefieren utilizarlo para dar un lavado verde a su marca y (como es lógico) vender más ropa. La verdadera moda sostenible significa comprar menos y comprar de forma más inteligente, aunque hay muchas más cosas que pueden englobarse en este término.

¿Qué significa exactamente la moda sostenible? Cuando se hace realidad, las empresas de moda sostenible recortan las emisiones de CO2, abordan la sobreproducción, reducen la contaminación y los residuos, apoyan la biodiversidad y se aseguran de que sus trabajadores reciban una remuneración justa y tengan unas condiciones laborales seguras. Sin embargo, esto es sólo una pieza del rompecabezas. Aunque las empresas deben cargar con la mayor parte de la responsabilidad, ya que son las que están detrás de los problemas sistémicos en primer lugar, hay cosas que los consumidores también pueden hacer para apoyar la sostenibilidad. Comprar el mismo número de artículos con la etiqueta de ‘sostenible’ no es suficiente, sino que es necesario replantearnos por completo los hábitos de consumo y compra. Aquí unos tips para mejorar nuestra forma de comprar ropa:

1. Comprar menos y comprar mejor.
Cada año se producen en el mundo 100 mil millones de prendas. Antes de hacer una compra, pregúntate a ti mismo: Comprar ropa que nos sirva, en lugar de servir a la ropa, puede marcar una gran diferencia.

2. Invertir en marcas sostenibles.
Comprar mejor también significa apoyar a los diseñadores que utilizan prácticas sostenibles, pero ojo: cuidado con las empresas que utilizan el término para hacer greenwash y vender más cosas. Investigando y haciendo que las empresas se responsabilicen de sus acciones, podemos apoyar a las que hacen el bien por el mundo.

3. Compra de segunda mano y vintage.
La ropa pre-amada y reutilizada es una forma estupenda de estar al día con las tendencias pero sin dejar de cuidar el planeta. Utilizando aplicaciones que atienden a estos sectores, como Depop, o acudiendo a bazares y ventas de garaje, no sólo reciclamos ropa, sino que apoyamos a los negocios locales.

4. Prueba la moda digital.
Por último, pero no por ello menos importante, ¿por qué no utilizar la tecnología en nuestro beneficio? No es ningún secreto que gran parte del atractivo de la moda es la necesidad de mantener las apariencias en línea, ya sea publicando una bonita historia en Instagram o bailando para un TikTok. Con la realidad virtual convirtiéndose en algo cotidiano, aplicaciones como DressX están atendiendo a la reinvención del consumo de moda a través de ropa digital que se puede poner encima de fotos y vídeos. Esto puede ofrecer una gran alternativa para el futuro de la moda, así que ¿por qué no probarlo?

Escribe tu comentario

Comentarios

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Facebook

Publicidad
Publicidad

Lo más visto