Este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su pesar por el fallecimiento de Carlos Manuel Urzúa Macías, destacado economista y político a quien designó titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP) al inicio de su administración. En un comunicado desde Palacio Nacional, el mandatario presentó sus condolencias, indicando: «Mi pésame a los familiares de Carlos Urzúa, lamento mucho su muerte, en lo que parece ser un accidente de acuerdo a lo que los mismos familiares han expresado».
Además, López Obrador acusó a la oposición de utilizar la muerte de Urzúa para avivar diferencias, agregando: «Desde ayer que se da este lamentable hecho, como Carlos estuvo de secretario de Hacienda al inicio de mi gobierno, tuvimos diferencias y renunció, y últimamente formaba parte del grupo de la candidata del bloque conservador, de manera muy irresponsable y vil algunos personajes empezaron a calumniar, hablar de presuntos ataques, daños, sospechas sobre nosotros. Y todo porque estamos en temporada de elecciones y están muy enojadas y desesperados».
Carlos Urzúa, quien estuvo al frente de la SCHP por un año, presentó su renuncia el 9 de julio de 2019, argumentando diferencias con la política económica de la Cuarta Transformación. En ese momento, Urzúa señaló: «Estoy convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que esta pueda tener y libre de todo extremismo, sea este de derecha o izquierda. Sin embargo, durante mi gestión las convicciones anteriores no encontraron eco. Aunado a ello, me resultó inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública».
Carlos Urzúa falleció el lunes 19 de febrero a los 68 años, tras sufrir un accidente en su domicilio ubicado en la alcaldía Magdalena Contreras. La Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que Urzúa cayó por las escaleras de su casa, resultando en su fallecimiento.
López Obrador concluyó expresando sus condolencias de manera breve y criticando el uso político del fallecimiento de Urzúa, resaltando que las acusaciones carecen de fundamentos.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en coordinación con la Secretaría de Energía, aseguró que la actualización al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios no provocará incrementos en el precio final de los combustibles a partir del 1 de enero. Las dependencias federales señalaron que el ajuste anual por inflación, previsto en la ley, será absorbido sin afectar a los consumidores, por lo que se mantendrá la estabilidad en las estaciones de servicio del país.
De acuerdo con la información oficial, esta decisión se sustenta en la estrategia nacional para estabilizar el precio de la gasolina, vigente desde marzo de este año. El esquema contempla un acuerdo voluntario con empresarios del sector para establecer un tope máximo de 24 pesos por litro en la gasolina regular, conocida como magna o de menor a 91 octanos. El objetivo es evitar que las variaciones en los mercados internacionales de hidrocarburos impacten en la economía de las familias.
Las autoridades indicaron que el compromiso se mantendrá pese a la actualización del IEPS, por lo que el precio en bomba no deberá registrar cambios significativos al inicio de 2026. La administración federal subrayó que este mecanismo forma parte de una política para preservar la estabilidad económica y contener presiones inflacionarias en los energéticos.
En las cuotas publicadas en el Diario Oficial de la Federación se establece que el impuesto para la gasolina magna será de 6.70 pesos por litro, mientras que para la gasolina premium se fijó en 5.65 pesos y para el diésel en 7.36 pesos por litro. Hacienda precisó que estos montos responden únicamente a un ajuste técnico por inflación y no modifican los términos del acuerdo con los distribuidores de combustibles.
El gobierno federal informó que dará seguimiento puntual a los precios finales para verificar que se respete el tope acordado en las estaciones de servicio. Con ello, se busca despejar dudas sobre posibles aumentos al cierre de año y garantizar que el ajuste fiscal no se traduzca en un alza para los consumidores. Asimismo, se reiteró que cualquier cobro que supere los límites establecidos puede ser reportado ante la Procuraduría Federal del Consumidor.