La librería británica Foyles inaugura mañana sábado en el centro de Londres su nueva sede, con más de 200.000 títulos apilados en seis kilómetros de estanterías, la mayor librería que abre en el Reino Unido en el siglo XXI.
El establecimiento, fundado en 1903 por los hermanos Foyles y ubicado desde 1906 en Charing Cross Road, ha ocupado en los últimos cien años diversos locales en la misma calle.
Foyles ha decidido abandonar el espacio que ocupaba desde 1929 para trasladarse a otro ubicado a tan solo dos edificios de distancia, una antigua facultad de Arte con una superficie equivalente a 13 pistas de tenis dividida en cuatro plantas.
El director de Foyles, Sam Husain, dijo que el nuevo local, ante el apogeo de los portales digitales de venta de libros como Amazon, ofrece «la posibilidad de relacionarte con otros lectores, perderse en la tienda, descubrir libros y tener charlas con los propios autores».
Husain recalcó que si «más de 200.000 personas acuden a nuestra tienda a buscar sus libros, es porque hay gente que prefiere esta forma de comprar».
«El nuevo diseño está pensado para que el local se parezca a muchas tiendas pequeñas juntas. Queremos que la gente viva la experiencia de buscar libros, de conocer a otras personas», cuenta Alex Lifschutz, arquitecto del proyecto.
Este nuevo local, más amplio pero más sencillo, busca la interacción entre clientes, la flexibilidad de los espacios y «la apariencia de una librería universitaria», según Simon Heafield, coordinador de comunicación y mercadotecnia de la empresa Foyles.
La nueva librería tiene además un auditorio con espacio para 200 personas, que acogerá desde el 11 de junio al 5 de julio el Festival de Apertura, que presenta a escritores como Val McDermid y Hilary Mantel así como música en directo y proyección de películas.
La librería fundada por los hermanos Foyles cuando tenían 17 y 18 años, tras anunciarse como vendedores de libros en un diario especializado en educación, es una de las más antiguas de la capital británica.
Durante la II Guerra Mundial, ante la política de Adolf Hitler de quemar libros en Alemania, los hermanos Foyles ofrecieron al dictador comprar dichos libros, oferta que Hitler declinó, según explica la libreríaen la nota con la que anuncia la apertura de su nueva sede en Londres.
You must be logged in to post a comment Login