Desde vacunas hasta antivirales y sueros, los fármacos contra el ébola exploran varias pistas. No obstante, de los seis estudios sobre fórmulas para combatir dicha enfermedad, cinco se encuentran en la etapa de experimentación con animales y no se sabe qué reacciones puedan generar en humanos.
Varios expertos debaten en la sede de la OMS las implicaciones éticas de experimentar esas sustancias con los afectados por la epidemia en África, donde hasta el 8 de agosto había 961 muertos y mil 779 infectados.
Ese cálculo oficial no contempla el caso confirmado ayer en Nigeria por el Ministerio de Salud, ni la muerte de George Combey, compañero del sacerdote español Miguel Pajares, que falleció en el Hospital ELWA, en Liberia.
La OMS considera acelerar el proceso o incluso “saltar etapas” de los estudios, pero “manteniendo salvaguardas”, comentó Jean-Marie Okwo-Bele, director del departamento de vacunas e inmunización de ese organismo.
Okwo-Bele dijo que también analizan usar suero de convalecencia, que consiste en anticuerpos de gente que se ha curado.
Tres vacunas
Entre los tratamientos cuyos estudios están más avanzados figura la vacuna de la firma inglesa GlaxoSmithKline (GSK), cuyo estudio de inocuidad —etapa que inicia pruebas con humanos— será en septiembre, indicó Okwo-Bele.
La vacuna de GSK está construida con un vector viral en el cual se insertan dos genes no infecciosos de ébola. Esa preparación desencadena la fabricación de una proteína contra la cual el organismo aprenderá a defenderse.
Además, el Instituto Nacional de Salud de EU y la Universidad Thomas Jefferson desarrollan otra inoculación contra el ébola sobre la base de una vacuna para la rabia, la cual puede servir para prevenir ambas enfermedades en la fauna salvaje, aunque se estudia otra versión para proteger a veterinarios. Esta vacuna todavía está en pruebas con animales.
Otra investigación, explicó Anthony Fauci, director del Instituto Norteamericano de Alergias y Enfermedades Infecciosas, es la de la biofarmacéutica Crucell (de Johnson & Johnson), que desarrolla una vacuna contra los virus ébola/marburg y, según el laboratorio, ya inició la primera fase de inocuidad en humanos.
No obstante, este estudio prevé una nueva prueba de fase 1 para fines de 2015 o principios de 2016.
Tres tratamientos
El ZMapp, un coctel de tres anticuerpos administrado a dos estadunidenses que se infectaron en Liberia, es un suero terapéutico “abusivamente” calificado de milagroso, según los especialistas. Aunque parece tener “cierta eficacia”, la administración a dos o tres pacientes no permite sacar conclusiones, afirmó Faucy.
“Varios cientos de tratamientos ZMapp pueden estar disponibles de aquí a fin de año”, indicó ayer Marie-Paule Kieny, directora general adjunta de la OMS, aunque “existen otros fármacos más avanzados para otras enfermedades que pueden adaptarse o usarse contra el ébola”, acotó la experta.
Otro fármaco es el TKM-Ebola, de la farmacéutica Tekmira, que estaba frenado por la agencia norteamericana de medicamentos, pero esa instancia le levantó la suspensión para poder hacer una prueba clínica experimental.
El favipiravir (T-705), un antiviral contra la gripe que fabrica Toyama Chemical, filial de FujiFilm, puede emerger como tratamiento y un portavoz de esa empresa indicó estar en pláticas con las autoridades de EU para probarlo.
Claves
México, sin riesgo
– José Antonio Meade, secretario de Relaciones Exteriores, afirmó que no hay reportes de mexicanos contagiados de ébola en África.
– El canciller explicó que trabaja con la Secretaría de Salud para monitorear la situación.
– Dijo que están pendientes “de cuidar el flujo de transporte internacional buscando eliminar cualquier riesgo”.
– Meade concluyó: “Estamos tranquilos conforme a esos protocolos… no hay mexicanos allá y no hay ningún riesgo en el país”.
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Liberia pide a EU el suero ZMapp
La presidenta de Liberia, Ellen Johson-Sirleaf, anunció ayer que ha pedido a Estados Unidos que ponga a su disposición un medicamento experimental contra el ébola ZMapp, desarrollado en ese país.
Johnson-Sirleaf aseguró que el acceso de Liberia a este fármaco puede ayudar a combatir la epidemia y dar esperanza a una población golpeada por el virus.
“Hemos sabido que la medicina les fue administrada a estadunidenses que contrajeron la enfermedad aquí, y por lo tanto (el fármaco) sería bienvenido”, declaró.
Al mismo tiempo, la presidenta defendió la incineración de los cadáveres de los fallecidos por el ébola como la mejor opción para prevenir nuevos contagios.
Johnson-Sirleaf pidió a los familiares de los fallecidos que comprendan que la incineración contribuye a evitar la propagación del virus, por lo que anunció que los nombres de los que sean incinerados serán grabados en un memorial.
Mientras tanto, el congresista estadunidense Christopher Smith ha declarado tras reunirse con la ministra de Exteriores de Liberia, Augustine Ngafuan, que EU se implicará en la financiación de la lucha contra el virus.
EFE/Monrovia
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