CIUDAD DE MÉXICO, México, abr. 9, 2015.- Autoridades diplomáticas de Argentina y Gran Bretaña convocaron a embajadores de sus similares por una nueva disputa sobre las Islas Malvinas.
El Ministerio británico de Asuntos Exteriores convocó a la embajadora argentina en Londres, Alicia Castro, en protesta por recientes declaraciones del Gobierno de Buenos Aires en relación con la defensa de las islas Malvinas, informó un portavoz de dicho ministerio.
Por su parte el Gobierno argentino convocó al embajador británico, John Freeman, para exigirle explicaciones por supuestas acciones de espionaje contra el país relacionadas con la disputa sobre las islas Malvinas y anticiparle que denunciarán a empresas petroleras por «exploración ilegal» en el archipiélago.
«Nos oponemos fuertemente a las recientes declaraciones de la presidenta argentina (Cristina Fernández) y de la embajadora argentina en Londres y, por tanto, hemos convocado a la embajadora para dar cuenta de esto», señaló el portavoz, que precisó que la convocatoria se produjo ayer miércoles.
La tensión entre los dos países, que se enfrentaron en 1982 en una guerra por la soberanía de las Malvinas, volvió a aumentar a raíz del reciente aniversario del conflicto -el 2 de abril- y el anuncio de Londres de que modernizará la defensa de islas, reclamadas por Buenos Aires desde 1833.
El portavoz añadió que el Reino Unido «no tiene dudas sobre su soberanía de las islas Falklands (como llaman los británicos a las Malvinas) y las áreas marítimas circundantes, ni tampoco el derecho de los habitantes de las Falklands a decidir su propio futuro».
Cristina Fernández y Alicia Castro criticaron recientemente la decisión de Londres de reforzar la defensa de las islas, a pocas semanas de los comicios generales en el Reino Unido, el 7 de mayo.
Con motivo del 33 aniversario del comienzo del conflicto del Atlántico Sur, Fernández instó al Gobierno británico a «no poner una libra más» en gastos militares para defender las Malvinas y pidió que utilizara los fondos para «alimentar ingleses».
Argentina y el Reino Unido se enfrentaron en una guerra por la posesión de las islas Malvinas en 1982, que culminó con la victoria de las fuerzas británicas el 14 de junio de ese año.
A través de un comunicado, la Cancillería argentina informó de la citación al embajador británico el mismo día que su homóloga argentina, Alicia Castro, hubiese sido convocada por Londres.
Argentina reclama la soberanía del archipiélago del Atlántico Sur, que está bajo control británico desde 1833, y se enfrentó al Reino Unido en una guerra por ese motivo en 1982, en la cual murieron 900 personas, en su mayoría combatientes de las tropas argentinas que desembarcaron en las islas.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.