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Política

Increpan a AMLO en la GAM; culpa a Mancera de boicot

Un mitin encabezado por Andrés Manuel López Obrador, en la colonia Cuautepec, de la delegación Gustavo A. Madero, se convirtió en un intercambio de insultos entre seguidores del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

“¡Fuera Batres!”, gritaban el sábado al menos unas 50 personas, aparentemente simpatizantes del PRD, en el evento proselitista, quienes llamaron “rateros” a los miembros de Morena.

En un video subido a Youtube se observa cuando las decenas de personas recriminan a López Obrador, mientras éste ofrecía un discurso arriba de una camioneta.

En la grabación, ambos bandos se gritan “¡paleros!”. Los ánimos se elevaron hasta el punto en el que Andrés Manuel López Obrador pidió a sus seguidores no caer en alguna provocación.

Después, se acercó a uno de los grupos que le gritaba consignas para decirles que no buscaba alguna confrontación, para después preguntarles si los había enviado Víctor Hugo Lobo, candidato del PRD a la jefatura de Gustavo A. Madero, o el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, o el líder del PRD, Carlos Navarrete.

Los integrantes de Morena exhibieron su molestia a través de las redes sociales. Incluso, hicieron señalamientos directos al mandatario capitalino y Víctor Hugo Lobo de orquestar el encuentro.

Mario Delgado, quien hace unos meses renunció al PRD para sumarse a las filas Morena, afirmó en su cuenta de Twitter que las personas que estaban en el mitin de López Obrador eran unos provocadores enviados de la delegación Gustavo A. Madero.

“Bloqueo gansteril en la GAM a #Morena y @lopezobrador_ ¿este es el piso parejo? @ManceraMiguelMX”, redactó el ex secretario de Finanzas.

Después, afirmó que ni los bloqueos, ni las despensas ni amenazas afectarían el crecimiento de Regeneración Nacional.

Martí Batres, líder de Morena, fue en el mismo sentido: acusar al gobierno capitalino de no brindar las condiciones para llevar a cabo el encuentro.

“A pesar de la provocación de la delegación Gustavo A. Madero el evento de Morena se realizó exitosamente. El GDF no cumplió en dar garantías”, escribió en su cuenta.

Aun así, otros usuarios lamentaron las descalificaciones que ambos hicieron contra quienes gritaron las consignas.

Fuente: La Crónica

Política

Nueva demanda detalla abusos en centro de detención de migrantes en Texas

Nuevas revelaciones sobre las condiciones al interior de un centro de detención para familias migrantes en Texas han avivado las preocupaciones continuas de abogados que representan a niños migrantes.

Los detalles son parte de una demanda en la que el gobierno intenta poner fin a las protecciones para niños migrantes. Las declaraciones de familias retenidas en la instalación de Dilley, Texas —la cual reabrió en marzo pasado— describían agua persistentemente turbia, retrasos en la atención médica y niños que permanecen retenidos por largos períodos de tiempo.

Las acusaciones de niños que pelean con adultos para tener acceso a agua limpia, menores de edad en condiciones de estrés y las tardanzas en la atención médica salieron a la luz por primera vez a mediados del año, mientras el gobierno del presidente Donald Trump solicitaba a una jueza federal que pusiera fin a una política que protege a los niños migrantes.

La jueza Dolly Gee, en Los Ángeles, escuchó los argumentos del gobierno para poner fin al Acuerdo de Flores. La política limita el tiempo que Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus iniciales en inglés) puede retener a los niños migrantes, además de que requiere que permanezcan retenidos en condiciones seguras y sanitarias.

Después de que el mes pasado Gee le pidió al gobierno que proporcionara los tiempos de detención, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus iniciales en inglés) informó que el número de niños bajo custodia por más de 72 horas disminuyó de un promedio de seis a cinco días durante junio y julio, respectivamente. La «gran mayoría» pasó menos de 72 horas bajo custodia de la CBP, indicó el informe.

Los abogados que representan a los niños revisaron el informe y señalaron que algunos de los menores siguen siendo retenidos durante semanas, e incluso meses, a menudo sin justificación.

Unas 65 familias han hablado con abogados desde la reapertura de la instalación.

«Un enorme porcentaje de familias en Dilley están siendo aprehendidas desde distintos puntos del país mientras se presentan diligentemente a sus audiencias en tribunales de migración y a revisiones del ICE», señaló Leecia Welch, subdirectora legal de Children’s Right, en un comunicado dirigido a The Associated Press.

El agua del grifo es turbia, tiene un olor extraño y causa malestar estomacal, dijeron las familias a sus abogados. El jabón de manos que la instalación pone a disposición para las duchas ha estado causando erupciones, añadieron las familias. Los niños también tienen dificultades para consumir los alimentos, como los bocadillos de galletas Graham, manzanas, jugo y leche.

A los detenidos se les permite comprar productos básicos, como agua embotellada a 1.21 dólares.

«Nunca había oído hasta ahora que los niños tuvieran que comprar agua», subrayó Welch, quien lleva ocho años visitando a niños bajo custodia de la CBP y de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados.

Las familias tienen que pagar hasta 5.73 dólares por un desodorante, 1.44 dólares por una barra de jabón y 2.39 dólares por pasta de dientes, destacó Welch en documentos judiciales. Una sola tableta de Tylenol cuesta 1.30 dólares, dijo.

Un niño al que le dolía el estómago tuvo que esperar seis horas para que una enfermera lo atendiera y no fue llevado a un hospital con apendicitis hasta que vomitó, según los documentos judiciales. Otro niño se cayó sobre su brazo y no fue sino hasta dos horas después que el personal lo llevó a un hospital para una radiografía.

Los padres dijeron que no hay actividades organizadas para los niños.

El hijo de una mujer le dijo que «ya no cree en Dios porque le reza pero aún no hemos podido salir de aquí», según su declaración, proporcionada por Welch.

Algunas familias están siendo liberadas sólo para ser detenidas nuevamente, explicó Welch. A una familia que fue liberada luego de pasar alrededor de 60 días en detención federal, se le pidió que se registrara con el ICE, y fue detenida nuevamente el día de su cita.

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