Aunque la INEGI revela que en 2014 hubo una disminución de homicidios a comparación del 2013, Chihuahua sigue siendo uno de los focos rojos a nivel nacional con mil 692 asesinatos, sólo por debajo del Estado de México que registró dos mil 879 y Guerrero mil 719.
A nivel nacional el año pasado se presentaron 19 mil 669 homicidios, un número sumamente elevado pero que descendió un 14.7 por ciento a comparación del 2013 que presentó un poco más de 23 mil.
Un estudio hecho por la empresa de inteligencia estadounidense Stratfor apunta a que el ‘Chapo’ buscará recomponer su red criminal en zonas como Ciudad Juárez, donde el Cártel de Sinaloa se ha visto debilitado, lo cual podría desembocar en otra guerra entre cárteles, pues ya operan otras agrupaciones criminales como el Cártel de Jalisco Nueva Generación.
El gobernador César Duarte asegura que hasta el momento todo está bajo control en el estado y que los más recientes hechos violentos sobre todo en la frontera, nada tienen que ver con la fuga del capo, sino que estos ya están desde hace rato. Uff, menos mal…
El problema mayor aquí no es quién es el que mata o aterroriza a los ciudadanos, sino que se mata, se secuestra, se aterroriza y el Estado y las corporaciones policiacas no están sirviendo de nada. Para muestra un botón: Guadalupe, un municipio en el que todos sus policías fueron masacrados y que ahora está bajo la seudo vigilancia del Ejército y la Policía Estatal.
Ayer ya tuvieron un enfrentamiento contra presuntos narcotraficantes en la “Caseta”, la zona donde se está construyendo el puente internacional del Tornillo, a 75 kilómetros de Ciudad Juárez, y se espera que estas reacciones continúen pues los criminales se han encargado de ahuyentar y matar al que se ponga.
Esta situación en años pasados también tocó a municipios como Urique, Galeana, Gran Morelos, Villa Ahumada, Práxedis G. Guerrero, Guadalupe y Calvo, donde las comunidades se quedaron sin agentes preventivos ante el azote de los grupos criminales que se apoderaron de la zona.
Mientras tanto… los políticos se pasean y buscan su próximo chapulinazo. Tal es el caso de los alcaldes de Juárez, Enrique Serrano, y el de Chihuahua, Javier Garfio, quienes en los últimos días han acompañado en varios eventos al gober Duarte.
Sabemos que ambos buscan la próxima gubernatura y tratan de hacerse los “caemebien” para ganarse el dedazo; sin embargo, el que también peleará por el trono será el ‘Teto’ Murguía, quien ha andado metiendo su cuchara en los temas estatales.
Como parte de esos eventos de protocolo, el gober visitó lo que será el próximo Centro Estatal de Justicia, el cual albergará a todo el Poder Judicial y en donde se pretende implementar plenamente el Sistema de Justicia Penal. El detalle es que para eso se necesita aún más inversión para adquirir todo el equipo necesario.
En principio se dijo que la obra tendría un costo de mil 550 millones de pesos, de los cuales ya se gastó las tres cuartas partes, pero ahora resulta que se requiere de otros 500 millones más para dejar todo muy chulo. Más inversión, más gasto, más deuda… A ver con cuantos ceros en rojo terminamos esta administración estatal.
Los que quieren eliminar sus números rojos son los panistas, quienes crearon una comisión especial para dar cuello a 800 militantes estériles y están buscando a quiénes culpar por esa afiliación masiva que se hizo sin consentimiento de los meros meros.
Los principales sospechosos son el presidente y director de Afiliación en Meoqui, Lucio Vázquez e Ismael Peña, respectivamente, y Javier Peña del Cuauhtémoc, aunque también investigan a varios líderes de Jiménez, Juárez, Delicias, Buanaventura, Madera y Nuevo Casas Grandes.