Los equipos de rescate reanudaron hoy la búsqueda de víctimas por el deslizamiento de tierras que arrasó el pasado jueves un asentamiento de Guatemala y que ha provocado, al menos, 32 muertos y 450 desaparecidos.
El encargado del puesto de control de la estatal Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) en el lugar, Sergio Cabañas, explicó que el restablecimiento de las labores se produjo alrededor de las 06:00 hora local (12:00 GMT).
Las operaciones de búsqueda se suspendieron de manera oficial ayer viernes a las 20:00 hora local (2:00 GMT del sábado) por medidas de seguridad y falta de visibilidad.
Debido a las copiosas lluvias de las últimas horas, el pasado jueves se registró un derrumbamiento que arrasó con un asentamiento en la colonia El Cambray II, del municipio de Santa Catarina Pinula, a unos 22 kilómetros de la capital.
Cabañas indicó que hasta el momento son 32 las personas fallecidas -tres de ellas menores de edad-, 36 las rescatadas con vida y entre 125 y 150 viviendas dañadas.
El número de damnificados albergados descendió en las últimas horas, pasando de 63 de ayer viernes a 36 a primera hora de este sábado, debido a que se trasladan a casas de familiares o amigos.
Según Cabañas las condiciones meteorológicas son «excelentes» y el pronóstico dice que no se producirán lluvias hasta bien entrada la tarde, por lo que los equipos de rescate trabajarán «incansablemente» para rescatar a más personas con vida.
No obstante, reconoció que durante las últimas horas se han producido «pequeños deslizamientos» en la zona afectada y agregó que «la corona está inestable» porque el cerro está fracturado y que pueden tener lugar «más movimientos».
Hasta el momento se han movilizado unos 30 vehículos pesados y 875 efectivos humanos, pero esperan que esta cifra aumente hasta los mil 800 en pocas horas.
Adelantó, además, que hasta el momento no hay ningún tipo de ayuda internacional trabajando en el lugar de los hechos.
Este es uno de los mayores desastres naturales que sufre Guatemala en lo que va de año, un hecho que obligó a las autoridades a declarar ayer viernes un alerta naranja institucional y roja a nivel municipal en la zona afectada.
Fuentes de la Conred explicaron que asentamientos como El Cambray II son producto de «invasiones» de terrenos por parte de familias que migran a las periferias de la ciudad y construyen sin tomar en cuenta parámetros de prevención de riesgos.
De acuerdo a la institución, solo en el área metropolitana hay 232 asentamientos considerados «de riesgo», al estar ubicados en laderas o barrancos, y se calcula que en ellos viven unas 300 mil personas.
Fuente Excélsior