Aviones de combate rusos realizaron 22 incursiones en las que destruyeron al menos 27 objetivos del yihadista Estado Islámico (EI) en Siria, en concreto en las provincias de Hama, Raqqa y Homs, informó el Ministerio ruso de Defensa.
La aviación rusa atacó esta madrugada 11 campos de entrenamiento del EI en Hama y Raqqa, además ocho blancos en la provincia de Homs, precisó el vocero del ministerio, el general Igor Konashenko.
Los ataques aéreos destruyeron las infraestructuras empleadas para adiestrar yihadistas”, dijo Konashenko durante conferencia de prensa.
Además, la Fuerza Aérea de Rusia destruyó esta madrugada varios refugios subterráneos con bombas antibúnquer en las cercanías de Arafit y Salma, y aniquiló una base del EI camuflada en un bosque, indicó.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), la mayoría de los bombardeos rusos se produjo en la provincia de Hama, especialmente en el sector de Sahl al Ghab, una llanura de la que el ejército sirio intenta desalojar a una coalición de rebeldes islamistas y de Al Qaeda.
En esta misma provincia, los rebeldes sirios derribaron un helicóptero militar, reportó el OSDH sin precisar si el aparato era sirio o ruso ni lo que ocurrió con sus ocupantes.
Los nuevos bombardeos rusos se producen un día después de que cuatro buques de guerra rusos lanzaron 26 misiles de crucero contra 11 objetivos del EI en Siria desde aguas del mar Caspio.
Los misiles, según el Ministerio de Defensa, impactaron en todos sus blancos, situados a unos mil 500 kilómetros de la zona desde donde fueron disparados.
Rusia comenzó el pasado 30 de septiembre su campaña de ataques aéreos en Siria dirigidos contra el EI, pero Estados Unidos y otros países occidentales han denunciado que la mayoría de los blancos son las fuerzas rebeldes que luchan por derrocar al presidente Bashar al-Assad.
De acuerdo con una encuesta publicada este jueves en Moscú, el 72 por ciento de los ciudadanos rusos percibe de manera positiva los bombardeos rusos en Siria, pero el 39 por ciento teme que la intervención lleve a un nuevo Afganistán.
Para el 47 por ciento de los rusos es justa la decisión rusa de apoyar al régimen de al-Assad en la lucha contra el EI y los rebeldes, en tanto para el 28 por ciento el país no debería intervenir.
Según el sondeo realizado por el instituto independiente Levada Center en 134 ciudades de Rusia, el 49 por ciento de los rusos confía en que Estados Unidos y los países occidentales por un lado, y Rusia y Siria por otro, lleguen a una posición común para resolver situación en Siria.
Fuente Excélsior