Luego del ajetreo por la reciente visita presidencial y el encuentro de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), siguen queriendo darle una manita de gato a Chihuahua pues es inminente una nueva visita presidencial, esta vez para inaugurar, por fin, la Ciudad Judicial.
Es precisamente en esta casa de justicia donde podría ocultarse una transa, ya que de los 1,050 millones iniciales que se proyectaron para su construcción, se pasó a cerca de 2,000 millones, un dineral, el cual según los que saben no está justificado y hay un fuerte tufo a transa, motivo por el cual ya andarían en la entidad auditores federales para ver en qué se gastó el dinero, aunque fuentes aseguran que no habrá cómo comprobarlo, pues le metieron mano y duro.
Los rumores tratan de achacarle el desfalco al titular de Obras Públicas, Eduardo Esperón, aunque aseguran que no tiene más responsabilidad que administrativa, pues el verdadero ejecutor de la obra sería Everardo Medina, subsecretario de la dependencia en Juárez.
Estos señalamientos no serían tan, tan llamativos, si no fuera porque Everardo pinta para llegar a la titularidad de un momento a otro, como parte de una serie de movimientos que pronostican realizará el gobernador para meter turbo en final de sexenio y dejar la planilla final con la que terminará su administración.
Pero el que no puede ni dormir de los nervios es el alcalde Javier Garfio quien está como quinceañera en vísperas por la inminente realización del encuentro de alcaldes, que con la presencia de Peña Nieto le alcanzó para atraer a los ediles indecisos quienes buscarán la oportunidad para tomarse la foto con el presidente y así presumir de su cariño y sus favores.
Más allá de la grilla y del golpeteo mediático que se ha llevado, a veces con razón, a veces no tanto, los resultados del Instituto Mexicano para la Competitividad destacan que Chihuahua es la cuarta ciudad más competitiva y sustentable del país, según el Índice de Ciudades Competitivas 2015 realizado en colaboración con Banamex, las cuales destacan también la adecuada disposición de basura y otros aspectos como vitales para la sustentabilidad ambiental.
Así, no le sorprenda que el alcalde Garfio ande de presumido en estos días, pues quiere que su mensaje llegue hasta el último rincón del estado, y el mensaje es: “yo también quiero jugar”, usted sabe cuál ‘cascarita’ es a la que quiere entrarle el alcalde.
Este mensaje lo dejó claro durante la reunión de alcaldes, recaudadores y dirigentes priístas, los verdaderos operadores del partido, quienes realizaron su aquelarre en Parral y tuvieron que aguantarse el besamanos a quienes consideran los ungidos para la gubernatura, pues fueron los únicos que hablaron, así como el anfitrión Miguel Jurado, quien tuvo que fingir una vena priísta que no tiene para congeniar con grillos tricolores como la dirigente estatal Karina Velázquez o el dirigente juvenil Christopher Barousse.
Donde ya encontraron la paz, parece, es en el Colegio de Periodistas de Chihuahua, donde últimamente ha habido una rebatinga sobre quién tiene más derechos: los miembros fundadores, una especie de consejo supremo que intentó hacerse, a la buena y a la mala, de la mesa directiva, mientras que las bases, conformadas por cerca de 150 afiliados hicieron valer su peso y al final se impusieron.
El pronóstico es reservado. El grupo (por lo pronto) derrotado está encabezado por periodistas de mucho colmillo y apoyados por personal de Gobierno, y nadie les cree eso de que de pronto les dio hambre por profesionalizar “a los chavos”.
A final de cuentas el gremio quedó muy fracturado, pues las diferencias entre personajes y grupos se hicieron irreconciliables en medio de acusaciones severas de chayotaje y desfalcos, y a fin de cuentas todos salieron embarrados, unos más, unos menos, por lo que la misión es construir una nueva mesa que incluya y concilie, y sobre todo que trabaje, pues tanto que han jaloneado al Colegio han acabado por despedazarlo.
La que sin duda quedará despedazada será la economía familiar, con el impuesto recién aprobado a la gasolina para el 2016, el cual haría llegar hasta a 20 pesos el precio del combustible, lo cual muchos consideran un robo en despoblado si consideramos que el costo por litro recién salido de la refinería es de entre 4 y 5 pesos, por lo cual le están sacando buenas tajadas, y eso que la cantaleta para privatizar el petróleo era que pagaríamos menos por los combustibles…
Esto será usado como ariete electoral, sin duda, y en el PRI y otros partidos debieran comenzar a preocuparse, pues esta puñalada a los bolsillos los distancia aún más de la ciudadanía y despertará más repudio que Ayotzinapa, Tlatlaya y otras tragedias juntas, ya que lo que al ciudadano lo que le duele le duele, es el bolsillo. Por cierto, todo se aprobó durante el huracán mediático Patricia, el cual fue una llamarada de petate que muchos sospechan fue inflada para crear una ‘cortina de agua’. Cierto o no, la raza empieza a sospechar.
Las que no dejan de hacer su luchita son las senadoras Lilia Merodio y Graciela Ortiz, pues tuvieron el fin de semana libre ya que no fueron requeridas en el cónclave parralense, con eso de que parecen eventos hechos a modo para favorecer a los candidatos oficiales. Pero ni de chiste perdieron el tiempo.
Lilia Merodio anduvo con comunidades indígenas y asociaciones civiles, llevando alimentos y otros beneficios de programas sociales públicos, apoyada por empresarios “amigos”, anónimos, para no hacer manchadera. Graciela está ocupando sus bases como su casa de campaña, donde también le salió lo filantrópica y ya está acarreando recursos para los damnificados por el huracán Patricia.
Al que parece que le está sonriendo la fortuna es al senador Javier Corral, quien ha andado más tranquilito pero trabajando fuerte y sin hacer (tanto) ruido en su proyecto hacia la gubernatura, ya que parece ser el activo más fuerte del panismo pues la gente más o menos lo conoce y se ha bañado de buena propaganda por su feroz crítica hacia los excesos del gobernador César Duarte, tanto así que es el más conocido de los aspirantes, aunque Gustavo Madero no anda tan mal y cualquiera sería buen gallo.
Pero la lucha en el PAN se antoja ríspida y destructiva, como siempre, pues a Mario Vázquez ya casi nadie puede verlo ni en pintura, y por más que trate de impulsar a Maru Campos como candidata única en Chihuahua y a Daniela Álvarez en Juárez, parece que no le saldrá la jugada, pues en el ADN panista está el hacerla de tos y todo indica que el dedazo encontrará mucha resistencia. Una muestra es que Vázquez mejor ni se para en los municipios donde no lo quieren, los cuales son muchos, después del numerito que le hicieron en Parral. Anda a salto de mata.