Un bombero voluntario quemado gravemente en un incendio en 2001 recibió el trasplante de rostro más amplio de la historia, el cual cubre su cráneo y gran parte del cuello, anunció el lunes un hospital de Nueva York.
La cirugía se realizó en agosto en el Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York. El paciente, Patrick Hardison, de 41 años, aún está recibiendo terapia física en el hospital, pero planea regresar a su casa en Senatobia, Mississippi, a tiempo para el día de Acción de Gracias.
La cirugía ha allanado el camino para que recupere la visión normal, y en una entrevista la semana pasada dijo que esto le permitirá lograr un objetivo importante: «Empezaré a manejar otra vez».
Más de dos docenas de trasplantes de rostro han sido realizados en todo el mundo desde el primero que se llevó a cabo en Francia en 2005. El doctor Eduardo Rodríguez, que encabezó al equipo quirúrgico que hizo el trasplante de Hardison y que recientemente escribió un artículo sobre el tema, afirmó que el de Hardison es por mucho el más extenso realizado exitosamente en términos de la cantidad de tejido transferido.
El trasplante se extiende desde la parte superior de la cabeza, sobre el cráneo de Hardison y baja hacia las clavículas enfrente. En la espalda alcanza lo suficientemente abajo que sólo un pequeño parche del cabello original del paciente permanece, y cuyo color fue igualado con el cabello rubio oscuro que crece en su nuevo cuero cabelludo. El trasplante incluyó ambas orejas.
Es «un logro histórico», dijo el doctor Amir Dorafshar, co-director del programa de trasplante facial en la facultad de medicina de la Universidad Johns Hopkins, quien no participó en la operación. «Este es el tipo de opción de tratamiento que potencialmente revolucionará el cuidado de los pacientes con lesiones por quemaduras faciales graves».
La cirugía comenzó el 14 de agosto y duró 26 horas. No dejó cicatrices en el nuevo rostro de Hardison porque la costura del tejido trasplantado corre por la parte posterior de su cráneo.
El donante fue un artista y ciclista competitivo de Nueva York, David P. Rodebaugh, de 26 años, quien murió por las lesiones de un accidente en bicicleta en una calle de Brooklyn.
Hardison se quemó el 5 de septiembre de 2001, en Senatobia, en el noroeste de Mississippi. De 27 años, padre de tres niños y con siete años de servicio como un bombero voluntario al momento del accidente, entró a una casa en llamas para buscar a una mujer. El techo se vino abajo, dejándole quemaduras de tercer grado en la cabeza, el cuello y el torso superior.
El Nuevo Herald