La muerte de Prince a causa de una sobredosis de fentanil desempolvó una investigación que, sin proponérselo, dio a conocer una red ligada al mercado negro y el narcotráfico. ¿Qué hay detrás del narcótico que mató al intérprete de ‘Purple rain’ y que ya producen cárteles mexicanos?
Este fármaco es de gran demanda en Estados Unidos y China, dos de los principales mercados para los narcos, además, de producirse a un menor costo que la heroína. De un kilogramo puro de fentanilo se obtienen, ya procesado, ganancias de 1.6 millones de dólares; mientras que de un kilogramo de heroína pura, apenas se alcanzan los 100 mil dólares, según informes de la DEA.
No es nueva la producción de fentanil en narcolaboratorios, hay reportes de su procesamiento desde hace una década en México, incluso, autoridades de Estados Unidos tienen conocimiento de la elaboración de pastillas en Colima, Nayarit y Guerrero.
En la primavera pasada, agentes aduanales de China incautaron 70 kilogramos del narcótico fentanilo y acetil fentanilo, que hallaron en un contenedor de carga con destino a México. Las drogas, parecidas al opio, eran tan potentes que seis de los agentes se enfermaron después de su manipulación. Uno más cayó en coma.
Una investigación publicada por The Wall Street Journal detalló como uno de los principales factores para el interés de cárteles de la droga, la poca regulación internacional sobre el fentanilo y sus productos análogos.
El boom de la droga alcanzó la Sierra de Guerrero, una comunidad enclavada en el corazón del estado. Filo de Caballos se ubica como una productora clandestina minoritaria. En ese poblado no hay pastillas, los pobladores la ofrecen en polvo…
¿El efecto? Basta saber que es 50 veces más potente que la morfina; para los adictos, la mezcla de analgesia y euforia que proporciona lleva a muchos a utilizarlo como sustituto de la heroína. Es simplemente letal.
La agencia estadounidense contra la drogadicción advirtió en abril que el fentanil es potencialmente mortal, incluso, a dosis muy bajas.
Excelsior