Tener relaciones sexuales no es cualquier cosa, pues han habido casos en los que incluso se ha llegado a causar daño físico en el intento de lograr ‘hazañas’ poco practicadas.
Lo que sí es que existen algunas formas de lograr un mayor placer cuando se echan a andar las ‘capacidades’ con la boca, y que en este domingo te enunciamos a continuación.
No se trata de lamer por lamer, ni tampoco de probar cosas o intentar hacerlas sin medir antes las consecuencias que puedan llegar a tener.
1. No ir directamente a los genitales. La intención es que parezca más romántico y se incremente el deseo con ello, por eso es recomendable primero iniciar con unos besos en la boca, el cuello, los brazos, el tórax, el vientre y de nuevo volver a subir, hasta lograr una máxima excitación.
2. No soplar. Esto va para los hombres, pues algunos no lamen ni acarician sino soplan, lo que puede acarrear infecciones, además de que podría resultar incómodo para ellas.
3. No morder. También aplica para las mujeres, pues se han dado casos de accidentes fatales con los miembros viriles debido a que ellas no miden la fuerza (ni el filo) de sus dientes.
4. Saborea. Hay personas que dicen que es asqueroso, pero eso no sería así si la higiene fuera una prioridad. Además de ser higiénico, es recomendable ‘gozar’ el acto en su totalidad, es decir, disfrutarlo y saborearlo.
5. Mírale a los ojos. Es un plus si puedes sostener la mirada mientras le haces sexo oral a tu pareja. Eso sí, se trata de ‘echar’ unos ojos sensuales, no de una persona que siente asco o peor, que está espantada.
6. Usa artículos especiales para jugar con los genitales. En los mercados de este tipo de productos hay de todos colores y sabores. Es necesario que pidas asesoría a los vendedores si no sabes cómo se usan.
7. Un poco de hielo en tu boca previo al sexo oral o sorbos de té también resultan estimulantes por las temperaturas.
8. Olvídate del ‘garganta profunda’. Esta técnica es la más vista en las películas pornográficas, pero en la realidad lo único que activa son las náuseas y nada en términos de sensaciones orgásmicas.