La CIDH presentó ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) el primer caso de desaparición forzada en México en el contexto de la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia organizada.
El caso se relaciona con la desaparición forzada de los primos Nitza Paola Alvarado Espinoza, José Ángel Alvarado Herrera y Rocío Irene Alvarado Reyes, por parte de militares, en el Ejido Benito Juárez, estado de Chihuahua, México, desde el 29 de diciembre del 2009. A la fecha se desconoce el destino o paradero de las tres personas y la mayoría de sus familiares se encuentran en Estados Unidos por temor a su propia seguridad.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) observa que la desaparición forzada en México ha ido en aumento en los últimos años, situación que ha merecido pronunciamientos y recomendaciones por parte de múltiples organismos internacionales y mandatos especiales en el ámbito de las Naciones Unidas.
El caso llegó a la comisión el 26 de junio del 2011 a petición del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres, de la Comisión de Solidaridad y Defensa de los Derechos Humanos, así como de la no gubernamental Justicia para Nuestras Hijas, organizaciones representantes de los familiares de las víctimas.
En ese momento, los peticionarios alegaron que el Estado mexicano tiene responsabilidad internacional por una serie de violaciones a los derechos cometidas en perjuicio de los familiares de las víctimas, como consecuencia de la desaparición forzada de sus familiares y por las acciones realizadas para conocer su paradero.
En contraste, el Estado solicitó que la petición fuera declarada inadmisible porque consideró que los recursos de la jurisdicción interna no han sido agotados al existir una investigación en el fuero ordinario interno destinada a lograr el esclarecimiento de los hechos y la ubicación de las presuntas víctimas.
Cinco años después, la CIDH determinó que los desaparecidos fueron privados de su libertad por parte de militares, con base en elementos de contexto, testigos presenciales, declaraciones de funcionarios públicos, además de múltiples informes.
En un reporte publicado este martes, la CIDH explica que cuando los familiares acudieron a denunciar lo sucedido y a solicitar información, les respondieron que no tenían conocimiento de su detención ni de su paradero, y se activaron mecanismos de encubrimiento. Con base en lo anterior, la comisión calificó los hechos como desaparición forzada.
En el Informe de Fondo, la comisión emitió una serie de recomendaciones como la de investigar de manera completa, imparcial y efectiva el paradero de las tres personas; conducir los procesos correspondientes por el delito de desaparición forzada; reparar adecuadamente las violaciones de derechos humanos y adoptar medidas para responder a la problemática en Chihuahua y en el país.
La Comisión Interamericana sometió el caso a la jurisdicción de la Corte porque consideró que el Estado no cumplió con las recomendaciones contenidas en el Informe de Fondo.
En cuanto la Corte IDH dé entrada al caso, tendrá que pronunciarse sobre otras violaciones conexas derivadas de las amenazas y hostigamiento que sufren los núcleos familiares de las víctimas desaparecidas.
El caso podría tardar más de un año en resolverse, toda vez que la Corte IDH debe atender otros asuntos regionales y del país.
En lista sobre los casos mexicanos ante este tribunal se encuentra el de 11 mujeres que fueron abusadas sexualmente en San Salvador Atenco hace 10 años por parte de agentes estatales.
Javier Duarte podría quedar libre en los siguientes días
El ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, ha sido absuelto del cargo de desaparición forzada durante una audiencia virtual, lo que abre la puerta a que el político priísta pueda salir libre.
Durante la audiencia, que se llevó a cabo este viernes desde Pacho Viejo, en Coatepec, Veracruz, Duarte consiguió el sobreseimiento del proceso penal en su contra por su presunta participación en el delito de desaparición forzada, por lo que ya no podrá ser juzgado por dicho crimen.
Javier “N” permanece detenido en elReclusorio Norte, ubicado en la CDMX, donde desde el año 2017 lleva su proceso tras declararse culpable de lavado de dinero y asociación delictuosa, Sin embargo, en el año 2022 un juez de control de Pacho Viejo dictó prisión preventiva contra el ex funcionario por el delito de desaparición forzada del policía David Lara Cruz.
Dicho elemento policiaco acudió a una evaluación de Control de Confianza en la academia de policía en la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz. Días después, David Lara fue encontrado muerto en la Barranca de La Aurora, donde se encontraron restos humanos.
Por ello, la Fiscalía del estado acusó a Duarte de ocultar la existencia de más víctimas, las cuales de 22 posibles personas en la fosa, se terminó reduciendo a sólo seis. Tras el resultado de la audiencia, estas acusaciones quedaron sin efecto.
¿Por qué Duarte podría quedar libre?
Luego de su captura en 2017, Javier Duarte fue acusado por el desvió de más de 3 mil millones de pesos durante su gestión en Veracruz y en 2019 fue sentenciado por un juez federal a nueve años de prisión por los delitos de asociación delictuosa y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El cómputo de la sentencia contra Duarte empezó a correr desde 2017 y aunque su condena termina en 2026, el ex gobernador tiene la posibilidad de salir antes de prisión bajo el criterio de buen comportamiento y con el sobreseimiento del caso de desaparición forzada, que generó en su momento fuertes movilizaciones por parte de colectivos de familias de desaparecidos que exigían un castigo ejemplar para el ex gobernador.
Hasta el momento, la Fiscalía de Veracruz no se ha pronunciado al respecto del fallo judicial favorable para con Duarte.
Cabe recordar que Javier Duarte, gobernador de Veracruz de 2010 al 2016 fue arrestado en Guatemala en abril del año 2017 luego de seis meses de haberse dado a la fuga durante la investigación en su contra por lavado de dinero y delincuencia organizada.