Manifestaciones secuestradas. Desde Los Pinos, y con réplicas en todo el país, se ha echado a andar la estrategia de infiltrar, adueñar y dirigir el descontento ciudadano hacia objetivos más favorables para el PRI-Gobierno y sus aliados, y en contra de los recién victoriosos panistas e independientes en numerosos estados. También se busca radicalizarlas cuando sea conveniente, tanto para pegarle a los adversarios como para justificar represiones, dependiendo el caso.
Vibra México es un ejemplo. Esta convocatoria iniciada por comprometidas organizaciones de la sociedad civil como Cencos, y respaldada por instituciones como la UNAM, de pronto se vio revuelta con otra a la que convocó Isabel Miranda de Wallace, un esquirol del gobierno en turno disfrazada de sociedad civil, y respaldada inusitadamente por la maquinaria priista y sus aliados como las principales televisoras, instituciones y organizaciones afines, funcionarios, políticos e incluso el Ejército. En Chihuahua hasta los empresarios de Bafar andan convocando… dese una idea.
La gente seguirá saliendo a las calles. Eso lo saben, y en vez de combatirlo buscan aplicar el viejo principio zen de no chocar contra una fuerza superior, sino encauzarla hacia los propios fines. En Chihuahua el legítimo enojo por el gasolinazo fue poco a poco dirigido hacia la administración estatal que no tiene nada qué ver con la medida, pues incluso el gobernador Javier Corral fue de los pocos que la votaron en contra en el Senado, rompiendo la línea de su propio partido.
Manipular el descontento. Es por ello que muchos priistas, conscientes de que los votos no volverán a su partido, han decidido mejor moverse a otro, y qué mejor que Morena, que no sólo se siente con la victoria en la bolsa para 2018, sino que ha ofrecido plena indulgencia a cualquier corruptela o crimen, convencidos de que el poder purificador de San Andrés los liberará de malas prácticas y pensamientos. Así, han visto que los cartelones, las despensas y los acarreos ya no funcionan, mejor aprovechar que la gente anda enchilada y sale solita a las calles. Bien bajado ese balón.
Quieren que la sangre llegue a los medios. Es por ello que la estrategia está dirigida contra el sector más débil de la actual administración estatal: las finanzas. No es casualidad que sean las casetas y las oficinas de recaudación los objetivos de las movilizaciones, y menos es casualidad que estas se den donde el PRI conserva buena parte de su capital político y ex proveedores dispuestos a meterle billete al descontento. Forzar a hechos de violencia y a una represión sería buen combustible para hacer quedar mal al nuevo amanecer, ojalá sepan torear las provocaciones.
Medios en pie de guerra. Es por ello que no sorprenden las embestidas de algunos medios de comunicación que ahora dicen que en su vida han visto influida su línea editorial por los multimillonarios contratos que recibían de publicidad, que son cosas aparte. Ahora resulta que esas cantidades que constituían y constituyen por mucho su principal fuente de ingresos no les importaban. Se olvidan del nado sincronizado que exhibían con portadas idénticas dictadas desde las oficinas de Comunicación de Gobierno, o las llamadas a las redacciones que eran casi diarias para hacer “sugerencias” o “aclaraciones” antes de que salieran las ediciones publicadas.
El gabinete se pone de pechito. Tampoco ayudan las acciones buenas que parecen (o son) malas de algunos funcionarios como Gustavo Madero, con reconocida y larga actividad empresarial tanto propia como familiar, el manejo sospechoso y a la vez transparente de las licitaciones, todo un coctel molotov para que se los arrojen. Tendrán que corregir y andar con pies de plomo para no dar lugar a suspicacias y mucho menos a transas y moches, algo que no es extraño en el panismo.
Modelo mediático podrido. Esto se debe a que los medios pasaron a ser durante décadas un apéndice de los gobiernos. Los dueños y directivos degustaban lujosas cenas y privilegios con cargo al erario, y seguro se extrañan las temporadas navideñas cuando las redacciones se atiborraban de regalos finos pagados con lo que nos cobran de impuestos. Mejor harían en replantear su modelo y explorar otras vías de financiamiento como ya hacen otros medios nacionales y extranjeros. La actual administración se está echando el tiro, pero ni en esta ni en las próximas volverán las carretadas de dinero sencillamente porque ya no funcionan. El gobierno de Duarte pagó miles de millones y vea cómo le fue.
Otros Madero en entredicho. Los Elías Madero le habrían prestado a la alcaldesa María Eugenia Campos un lujoso departamento en la Torre Cenit, lo más ‘nice’ de lo ‘nice’, desde donde podrá observar la ciudad que gobierna mientras arreglan su casa dañada por las lluvias. Algunos insidiosos malpensados dudan de lo buena onda de los Elías, y tienen la mente tan cochambrosa que creen que lo hacen por influir en el reglamento de Desarrollo Urbano para poder instalar gasolineras a sus anchas. Gente de mal corazón.
Uriarte se cuajó. Al que le fue bien fue a Fernando Uriarte, diputado federal por el primer distrito de Juárez, quien quedó no sólo como líder de los diputados del PRI sino como vicecoordinador de la comisión de seguridad en San Lázaro. Así se completa el enroque luego de que a Alejandro Domínguez ni en su casa lo pelaban, ni él los pelaba pues anda tendido por la dirigencia estatal del PRI. Este podría ser un buen augurio para Uriarte.
Poder judicial en sospechosa calma. Muchos no entienden por qué 13 magistrados tanto del PRI como del PAN que eran contrarios a Javier Corral y lo tundían por debajo y por encima de la mesa cada que podían, de pronto se quedaron calladitos. A lo mejor porque en esa mesa está su permanencia en el poder judicial que el nuevo amanecer ha impugnado por todos los medios posibles, pero con el suficiente tacto como para no echar a perder al único poder que al menos en apariencia anda mansito y diligente. A lo mejor ya hay acuerdo, pero nadie suelta prenda.
Reunión antitrump en Chicago. Hasta el momento no se ha confirmado la presencia del gobernador Corral en la ‘ciudad de los vientos’ como parte de la cumbre de gobernantes binacionales que tiene como objetivo enviar un mensaje y tomar acciones de cobijo para los 700 mil connacionales que habitan en aquella urbe. Los que ya confirmaron fueron Miguel Ángel Mancera, de la Ciudad de México, Enrique Alfaro, de Guadalajara, y Armando Cabada, de Ciudad Juárez, quien por cierto anda muy cercado de los primeros.