Conecta con nosotros

Deportes

Se llevó Chihuahua primer lugar en Olimpiada Estatal; cerró con 465 medallas

Luego de que concluyera la etapa selectiva de la Olimpiada Estatal, el municipio de Chihuahua culminó en el primer lugar del medallero tras lograr un total de 465 preseas, explicó el director del Instituto Municipal de Cultura Física y Deporte, Orlando Villalobos Seáñez.
La delegación de Chihuahua cerró con más de 200 medallas de diferencia ante su más cercano competidor –Ciudad Juárez-, por lo que se extendió una felicitación a todos los atletas que representaron a la capital y lograron 223 medallas de oro, 140 de plata, y 102 de bronce.
Chihuahua lució imponente gracias al talento y dedicación de sus deportistas que en boxeo, softbol, atletismo, handball, voleibol de sala, basquetbol, luchas asociadas, bádminton, karate, ajedrez, levantamiento de pesas, tenis, nado sincronizado, ciclismo, pentatlón moderno, boliche, béisbol, voleibol de playa, tiro con arco, tiro deportivo, futbol asociación, tenis de mesa, gimnasia de trampolín, polo acuático, esgrima, rugby, racquetbol, tae kwon do, triatlón y frontón, se apropiaron del 42 por ciento de las medallas de oro entregadas en la competencia.
Al concluir la Olimpiada Estatal, los mejores deportistas de la justa lograron su calificación a la etapa regional, la cual se llevará a cabo durante la primera semana del mes de abril.

Deportes

Dodgers se enfrentan al ICE: rechazan uso del estadio como base para redadas migratorias

En un acto sin precedentes, los Dodgers de Los Ángeles negaron este jueves el acceso a vehículos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) a los estacionamientos del Dodger Stadium, en lo que representa una clara postura frente a las redadas migratorias que han estremecido a la comunidad latina en California.

La organización deportiva, considerada uno de los símbolos más influyentes de la ciudad, emitió un mensaje contundente a través de su cuenta oficial en X: “Esta mañana, ICE agentes llegaron al Dodger Stadium y solicitaron permiso para acceder a los estacionamientos. La organización les negó la entrada. El juego de esta noche se jugará según lo programado.”

Fuentes locales señalan que los vehículos del ICE —algunos adaptados para operaciones logísticas y detenciones— habían intentado establecer una posible área de concentración temporal cerca de la Puerta E, en Elysian Park, como ha sucedido en otras zonas como Hollywood o Pasadena. Sin embargo, la administración del equipo, respaldada por el carácter mayoritariamente privado del inmueble, ejerció su derecho de admisión para frenar el intento.

Parte del terreno del estadio sigue en manos del expropietario Frank McCourt, pero la decisión final fue consensuada dentro de la directiva del club, que ha enfrentado presión en días recientes para asumir un rol más activo frente a las detenciones migratorias.

Ese mismo día, se esperaba que los Dodgers presentaran un plan de apoyo a organizaciones que brindan asistencia a inmigrantes afectados por redadas. Lo ocurrido marca, según activistas y medios locales, “la primera respuesta contundente” del club en defensa de su afición migrante, históricamente base fundamental de su identidad y legado.

Alrededor de dos decenas de manifestantes se congregaron de manera pacífica frente al estadio para exigir el retiro del ICE y mostrar solidaridad con las comunidades afectadas. La Policía de Los Ángeles (LAPD), a solicitud del equipo, mantuvo a los manifestantes fuera del acceso principal.

La concejala Eunisses Hernández, en declaraciones posteriores, criticó la presencia de ICE en zonas cercanas al estadio y celebró la decisión de los Dodgers al señalar: “Propiedad privada es diferente. Pueden decir: ‘no en mi propiedad’.”

También hubo pronunciamientos dentro del vestidor. El pelotero puertorriqueño Kiké Hernández expresó públicamente su respaldo a la comunidad migrante, sumándose al mensaje de inclusión que la organización ha querido reforzar.

Pese a la tensión, el encuentro entre Dodgers y Padres se celebró sin contratiempos, con gradas llenas y sin alteraciones en el campo. Pero el gesto del club no pasó desapercibido: en una ciudad donde la inmigración es parte esencial del tejido social, los Dodgers han decidido no quedarse al margen.

Lo sucedido podría marcar un precedente sobre el papel que equipos deportivos pueden asumir ante políticas migratorias controvertidas. En un momento donde el deporte y la política se entrelazan más que nunca, los Dodgers no solo jugaron un partido este jueves: también fijaron una postura.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto