El 70 por ciento de los pingüinos rey desaparecerá abruptamente o se verá obligado a buscar nuevos hábitats antes del fin de este siglo si no se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, advierte un estudio publicado hoy por Nature.
La investigación, liderada por expertos de la Universidad de Estrasburgo, Francia, y la Universidad de Oslo, Noruega, estimó que esa amenaza provocada por el calentamiento global afectará a en torno 1,1 millones de parejas en edad de reproducción de esta especie de mamíferos del Océano Antártico.
Aunque la tendencia natural de los animales de estos climas fríos es la de dirigirse hacia zonas más australes cuando sus hábitats experimentan subidas de las temperaturas, el pingüino rey (Aptenodytes patagonicus) se comporta de manera diferente, explican los autores.
Las parejas de pingüinos rey, recuerdan, solo se reproducen y crían a su descendencia en islas del Océano Antártico que están libres de hielo, ecosistemas altamente fragmentados que dificultan su movilidad cuando se ven obligados a migrar.
Para pasar de un hábitat reproductor a otro, estos mamíferos se ven obligados a dar «saltos escalonados» de isla a isla, al tiempo que sus zonas de alimentación también varían constantemente debido al desplazamiento del Frente Polar Antártico y de las corrientes oceánicas asociadas.
El estudio de la respuesta de estos animales a esas condiciones cambiantes y complejas, subrayan, presenta dificultades para los investigadores.
En este sentido, los expertos desarrollaron un «modelo de nicho ecológico biofísico», apoyado en datos genómicos de poblaciones de pingüinos rey y en dinámicas anteriores, para obtener simulaciones de los cambios de ecosistema ocurridos en el pasado e identificar, al mismo tiempo, áreas vulnerables en el futuro.
En caso de mantenerse las tasas de emisiones actuales de gases de efecto invernadero, el 49 por ciento de la población de Aptenodytes patagonicus que se reproduce en las Islas Crozet y de las Islas Príncipe Eduardo perderá completamente sus hábitats a finales del siglo XXI.
Asimismo, el 21 % de pingüinos de las islas de Kerguelen, Malvinas y Tierra del Fuego experimentará alteraciones significativas en sus condiciones de vida, pues deberá cubrir distancias más largas para encontrar comida.
No obstante, estas pérdidas podrían verse compensadas por la colonización de la Isla Bouvet y por el aumento de las poblaciones en las Islas Heard y en las Islas Georgias del Sur, al hilo de una mejora en las condiciones de alimentación.
Los expertos agregan que este modelo de investigación puede ser útil para analizar el futuro de otras especies que habitan ecosistemas altamente fragmentados.