A menos de que se presenten nuevas pruebas, el caso Colosio podría reabrirse, aseguró la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
Por lo que la petición de la familia de Mario Aburto Martínez, asesino confeso del excandidato presidencial, condenado a 45 años de prisión, no es suficiente, afirmó.
En entrevista, Sánchez Cordero señaló que a la fecha no se ha presentado ningún elemento superveniente, es decir ninguna prueba de la que no se tenía conocimiento durante el proceso judicial que se inició tras el asesinato de Colosio Murrieta, hace 25 años, en Lomas Tuarinas, Tijuana.
«Si hay elementos supervinientes, si no lo hay, esa es la única rendija que se dejó. Hechos supervenientes», dejó en claro.
La funcionaria comentó que el exfiscal especial para el caso Colosio, Luis Raúl González Pérez le entregó un disco con información de la indagatoria que realizó.
«La investigación del caso está prácticamente cerrada, él hizo un estudio impresionante», indicó.
Y añadió: «Me entregó un disco y me dice que estaba en reserva el caso, por si habría pruebas supervenientes, pero nada más. Básicamente ahí está todo, hay sentencias definitivas y hay una investigación científica de altísimo nivel de la UNAM sobre todos estos hechos».
Vanguardia