El tinte para el cabello es uno de los productos de belleza más populares entre las mujeres, quienes lo usan para cubrir las canas o para darle un toque diferente de color a sus melenas, sin embargo, esto puede causar un grave riesgo de cáncer.
De acuerdo con el National Cancer Institute (NCI), se estima que más de un tercio de las mujeres mayores de 18 años y alrededor del 10 % de los hombres mayores de 40 años usan algún tipo de tinte para el cabello.
Los tintes pueden ser permanentes, semipermanentes y temporales, siendo los primeros los más solicitados entre las mujeres, pues son el 80 % de todos los tintes que se comercializan actualmente.
Aquellos permanentes consisten en dos productos: «intermedios» (sustancias químicas llamadas aminas aromáticas) y «acopladores» que, combinados con peróxido de hidrógeno, reaccionan y forman las moléculas de color que pintan el cabello.
Generalmente, los colores más obscuros son los que tienen mayores cantidades de «intermedios». En tanto que los tintes semipermanentes y temporales no necesitan de oxidación y pintan el cabello directamente.
Pero lo preocupante aquí es que estos productos de belleza contienen más de 5,000 sustancias químicas diferentes, entre ellas, las aminas aromáticas, y se ha comprobado que algunas de esas sustancias son causantes de tumores cancerígenos en animales.
Además de eso, si los tintes no son aplicados por un experto con experiencia en coloración, sus reacciones químicas pueden ocasionarte severos daños a la piel, como le ocurrió a Idina Rivera, quien fue al salón por un cambio de look, pero su cuero cabelludo fue quemado.
Es por ello que los tintes para el cabello han llamado la atención de numerosos científicos que han llevado a cabo múltiples estudios para determinar si este producto es un factor de riesgo de cáncer en las personas.
Fuente: Vanguardia