Los agentes de la Fiscalía Antisecuestro investigan el caso del secuestro de Norberto Ronquillo, hasta el momento se manejan dos líneas.
La primera apunta a una posible banda delictiva que se dedica al secuestro de estudiantes con un perfil idéntico al del chihuahuense. La segunda tiene relación con “alguien” del entorno cercano a Norberto, una persona allegada o un familiar, pudo orquestar todo.
Inconsistencias en el caso Norberto
Así se perfila en los primeros avances asentados en la carpeta de investigación FCIH/UI-1C/D/00100/06-2019, en la que se revela que se encontraron “algunas inconsistencias” en los horarios posteriores al plagio y a la narrativa de hechos, puesto que apenas 15 minutos después del secuestro del joven se comunicaron con la familia pidiendo un rescate millonario.
A decir del análisis de los especialistas, llama la atención que los secuestradores nunca mandaron la denominada “prueba de vida“; es decir; una fotografía o vídeo en la que mostraran que Norberto estuviera en poder de ellos.
“Tía, tía, por favor ayúdame”
Los familiares aseguraron que la negociación se realizó vía WhatsApp y que en algún momento sólo escucharon decir: “Tía, tía, por favor ayudame, soy yo, Norberto”.
De igual manera, tratan de esclarecer el por qué, luego de que la familia denunció el hecho y solicitó la intervención de la procuraduría capitalina, 14 minutos después rechazaron la ayuda, bajo el argumento de que ellos solucionarían el problema, por lo que no descartan —de ser necesario— volver a entrevistar a parte del alumnado y con quienes el oriundo de Meoqui, Chihuahua, convivía más.
Fuente: Diario de Yucatán