Al menos cinco personas murieron y unas 70 resultaron heridas a causa del sismo de magnitud 6.6 que sacudió este martes la isla de Mindanao, en el sur de Filipinas, en la misma área en la que hace dos semanas un temblor de 6.4 causó siete muertos y 200 heridos.
Entre las víctimas mortales identificadas se encuentran un hombre de 66 años en Korondal (Cotabato), por un traumatismo en la cabeza; un joven de 15 años sepultado por escombros cuando se trasladaba a un lugar más seguro en Magsaysay (Davao del Sur).
También perecieron un padre junto a su hijo en Arakan y una mujer embarazada de 23 años en la ciudad de Tulunan, ambas localidades ubicadas en Cotabato, según el último recuento actualizado facilitado por la gobernadora de esa provincia, Emily Lou Mendoza.
La jefa del centro de manejo de desastres de Cotabato, Rolly Aquino, confirmó que al menos 70 personas están siendo atendidas en hospitales y centros de salud con heridas o problemas de hiperventilación en varias localidades de la zona, donde el temblor se sintió con fuerza 7, considerada «destructiva».
Las autoridades todavía no han informado sobre los daños en viviendas e infraestructuras, aunque advirtieron de que se esperan «daños importantes» a causa del temblor, que ha tenido una veintena de réplicas, incluida una que alcanzó magnitud de 6.1.
Su epicentro se situó cerca de Tulunan, la misma ciudad donde se localizó el epicentro del fuerte terremoto del 6.4 del 16 de octubre, informó el Instituto de Vulcanología y Sismología de Filipinas (Phivolcs).
El organismo emplazó el sismo a unos 60 kilómetros de Davao, la ciudad más grande de Mindanao y la tercera mayor de Filipinas, donde el temblor se sintió con intensidad «muy fuerte».
Phivolcs circunscribió el hipocentro del terremoto a 7 kilómetros de profundidad, aunque el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que vigila la actividad sísmica del mundo, lo ubicó a 15.3 kilómetros.
Filipinas se asienta sobre el llamado ‘Anillo de Fuego del Pacífico’, una zona que acumula alrededor del 90 % de la actividad sísmica y volcánica del mundo y que es sacudida por unos 7 mil temblores al año, la mayoría moderados.
Sismo de magnitud superior a 5 se registran de manera esporádica en la isla sureña de Mindanao; en el archipiélago de Batanes, el extremo septentrional del país; y en la región de Bicol.
Este año el país ha sufrido varios temblores mayores a magnitud 5. Los mas letales ocurrieron en la provincia de Pampanga el pasado abril, que causó 16 muertos, y otro el pasado julio en Batanes con nueve.
El último gran sismo que golpeó el país fue un temblor de 7.1 que ocasionó mas de 220 muertos en el centro de Filipinas en octubre de 2013; y en julio de 1990 más de 2 mil 400 personas perdieron la vida en la isla de Luzón por un terremoto de 7.8, uno de los más fuertes que ha azotado el país.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.