Sujetos armados irrumpieron en el hospital comunitario del municipio Juventino Rosas y privaron de la libertad a un paciente que minutos antes había ingresado, mientras que una hora después, un segundo grupo armado ingresó a otro hospital, en Apaseo El Grande, para asesinar a un paciente que minutos antes había sido admitido.
En el primer hecho, los delincuentes golpearon a varias personas, ambos grupos, en total impunidad.
En ambos casos los agresores huyeron.
Aunque ambos hechos trascendieron en la prensa hasta este jueves, ocurrieron un día antes al final de una jornada particularmente violenta, que incluyó bloqueos por cateos en Juventino Rosas, con automóviles, armas y drogas decomisadas y tres detenidos, actos vandálicos en la casa de la alcaldesa de Cuerámaro, donde la turba incendió la del padre de un presunto multihomicida imprudencial, mientras que en Salamanca balearon un condominio y “levantaron” a un hombre, que apareció asesinado horas después. Un auténtico Miércoles negro.
Mientras se realizaba el operativo conjunto de la Fiscalía General de Guanajuato y el Ejército Mexicano en Juventino Rosas, civiles armados burlaron la vigilancia que permanecía en el municipio y a las 21:15 horas del miércoles, mismo día del vistoso operativo, al menos ocho hombres armados arribaron en una camioneta tipo van de color obscuro, una camioneta tornado en color blanca y un vehículo rojo al hospital comunitario, donde amagaron a los vigilantes de seguridad privada que resguardaban la zona e ingresaron hasta el área de urgencias.
En presencia de familiares de los pacientes y el personal médico, privaron de la libertad a un hombre identificado como Alfonso de 25 años, que una hora antes había ingresado al nosocomio por heridas de arma de fuego junto con un segundo paciente quien también recibía atención médica, pero este solo fue golpeado; al hombre sí se lo llevaron. No hay rastro suyo.
Las dos víctimas resultaron heridas una hora antes en hechos ocurridos en la calle Francisco I. Madero esquina con Aquiles Serdán, donde sujetos armados (se ignora si fueron los mismos) los atacaron a balazos. En la zona se decomisaron dos vehículos con varias armas de fuego cortas.
A las 22:00 horas de esa misma noche, hombres armados ingresaron al hospital comunitario de este municipio y asesinaron a Óscar en la misma camilla en la que era atendido. La víctima unos minutos antes había ingresado al nosocomio con heridas de arma de fuego. En el lugar también se encontraban enfermeras y doctores que atendían al lesionado.
Fuente: Sin Embargo