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México

Propóleo auxilia contra covid-19, según estudio preliminar

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La UNAM dio a conocer que el propóleo posee propiedades auxiliares contra el covid-19 por su actividad antibacteriana, antiviral y antimicótica.

“Aún no se ha analizado completamente el efecto de esta sustancia en casos clínicos por la enfermedad del coronavirus, pero se puede ingerir como un tratamiento complementario”, aclaró Tonatiuh Cruz Sánchez, académico de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán de la UNAM.

Según la información difundida por la máxima casa de estudios, el propóleo actúa como inmunomodulador en el organismo, es decir, potencia la respuesta contra agentes infecciosos.

“Se puede tomar para evitar padecimientos virales como influenza estacional, que será importante disipar antes de que converja con la covid-19. Puede ser consumida por la mayoría de la población, a excepción de niños menores de dos años, embarazadas, personas alérgicas al polen y al mismo propóleo, o con una reciente cirugía de trasplante”, señaló Cruz Sánchez.

Desde hace una década, en la FES Cuautitlán se han estudiado las propiedades del propóleo mexicano proveniente de la abeja nativa sin aguijón y de la Apis mellifera, al que se le han encontrado más de 300 compuestos químicos, como fenoles y flavonoides, los cuales le proporcionan actividad biológica.

Entre los fenoles, Cruz Sánchez se refirió al éster fenetílico del ácido cafeico, que actúa sobre la polimerasa viral, una enzima capaz de replicar el material genético de la covid-19, lo que lo convierte en un excelente antimicrobiano.

En tanto, los flavonoides contienen antioxidantes como la pinocembrina, a los que se atribuye actividad antiviral.

Para analizar sus efectos, el Laboratorio de Morfología Veterinaria y Biología Celular determinaron el efecto antiviral del propóleo en cultivos celulares infectados con diversos virus.

Excelsior

México

Senado aprueba Ley General de Aguas en medio de acalorado debate y críticas de oposición

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El Senado mexicano aprobó este jueves, con 85 votos a favor y 36 en contra, el proyecto de decreto que expide la Ley General de Aguas y reforma diversas disposiciones de la Ley de Aguas Nacionales, en un contexto de creciente presión sobre los recursos hídricos del país por sequías, conflictos por concesiones, crecimiento urbano y alta demanda del sector agrícola.
La minuta fue remitida al Senado por la Cámara de Diputados, que la aprobó tras 24 horas de acaloradas discusiones. La iniciativa deriva de una propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum para regular el derecho humano al acceso, disposición y saneamiento del agua, así como priorizar su consumo humano y doméstico ante autorizaciones, permisos, concesiones y asignaciones del recurso.
El senador Óscar Cantón Zetina, de Morena, aseguró que el centro de este proyecto es la persona y no los grandes acaparadores de agua, pues se crea un trinomio virtuoso entre tierra, agua y gente. Afirmó que la legislación es la mayor aliada de los productores y campesinos de México, ya que elimina la visión mercantilista del agua y la regresa a su dueño legítimo, que es el pueblo de México.
La senadora del PAN, Verónica Rodríguez, señaló que esta reforma convierte el agua en un instrumento de manipulación política y electoral. Apuntó que le da al gobierno federal la posibilidad de decidir de manera discrecional quién mantiene su concesión, quién la pierde, a quién le reducen volúmenes de agua y a quién sí le permiten operar, lo que demuestra que es peligroso para la democracia, el campo, la seguridad alimentaria y las familias.
Carolina Viggiano, del PRI, advirtió que el proyecto no contó con estudios económicos ni presupuestales, no cuenta con análisis de impacto financiero y tampoco se asegura inversión para la infraestructura, operación ni vigilancia de los sistemas de agua. Además, señaló que no se consultó a los pueblos originarios.
Luis Donaldo Colosio, de Movimiento Ciudadano, indicó que los cambios abren la puerta a más control gubernamental sin contrapesos reales, a más trámites y a más incertidumbres para el campo mexicano. Afirmó que se concentran atribuciones en la Comisión Nacional del Agua sin reglas claras, crece el riesgo de arbitrariedad, corrupción, favoritismos y castigo político, además de que se crea incertidumbre en la asignación de derechos y volúmenes, lo que desincentiva la inversión, la tecnificación y frena proyectos.
La nueva Ley General de Aguas establece que las concesiones para el uso del vital líquido no podrán ser intercambiadas entre particulares, con la obligatoriedad de que sea la Conagua la que las distribuya de nuevo.
La discusión y aprobación en las Cámaras de Diputados y Senadores ocurre en un contexto donde el sector agrícola consume cerca del 75 por ciento del agua disponible para consumo en el país.

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