El Diputado federal Gerardo Fernández Noroña, quien aspiraba a presidir la Mesa Directiva de la Cámara, acusó anoche a Olga Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación, de una “operación de Estado” para evitar que él asumiera.
Pero esta mañana el Presidente Andrés Manuel López Obrador le fue más claro al legislador del Partido del Trabajo (PT). Negó que hubiera intervención del Gobierno federal en ese cuerpo legislativo y volvió a ser duro en la respuesta:
“No deben importarnos los cargos, sino el encargo. Estamos para transformar. No es más de lo mismo. No es saber cómo nos colamos, cómo nos encaramamos, cómo avanzamos sin escrúpulos morales. No es Maquiavelo: no es que el fin justifica los medios”, dijo el Jefe del Estado mexicano.
Durante un mensaje en redes sociales, cuando hablaba de López Obrador (pero no dirigiéndose a él de manera directa), Noroña dijo ayer en video que “el poder a los inteligentes los nubla y a los pendejos los vuelve locos”.
El Presidente criticó desde hace días –también sin mencionarlo– las maniobras de Fernández Noroña y del Partido el Trabajo para crecer a tercera fuerza en ese cuerpo legislativo sumando legisladores que han sido calificados de corruptos por años. “No es triunfar a toda costa, sin escrúpulos morales”, dijo López Obrador antes. Ahora lo repitió.
Además de un video, el legislador petista aseguró en Twitter: “Mi general, tengo tomada la plaza. Me han ordenado entregarla a los conservadores y me niego a hacerlo. Traigo 35 puñaladas por la espalda y ni aún así entregaré la plaza. Si esto sucede, otros serán responsables de entregarla”.
Pero el Presidente parece no estar de acuerdo con la molestia de Fernández Noroña. Hay un acuerdo cameral que estipula que después del que Morena asumiera la Mesa Directiva seguiría la segunda fuerza política (PAN, 2019-2020) y luego el PRI (2020-2021). El legislador quería que ese acuerdo fuera burlado convirtiendo al PT, de manera artificial, en tercera fuerza.
Fuente: SinEmbargo