El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) agradeció al inicio de su llamada con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, su devoción y su detalle de hablar de entrada en la conversación sobre la Virgen de Guadalupe, de la cual dijo ser devoto.
“Le agradezco que haya empezado está conversación de esa manera porque eso tiene que ver con el México profundo”, dijo López Obrador.
Agregó que otro símbolo que todos los mexicanos respetan es al presidente Pablo Benito Juárez García, el mandatario que gobernó al país en la segunda mitad del siglo XIX.
En la introducción, reiteró que hay buena voluntad para mantener buenas relaciones con su vecino del norte.
“Nos une la economía, el comercio, la cultura la historia y la amistad entre nuestros pueblos”, indicó AMLO.
Esta tarde sostienen una reunión virtual los presidentes de ambos países con el fin de arreglar temas migratorios y sanitarios, entre ellos un programa de apoyos para los trabajadores mexicanos en ese país y la posibilidad de que EU envíe vacunas contra el Covid-19 a México.
Este último aspecto fue descartado por autoridades de EU, pues la prioridad para ese país es la vacunación de su población.
“Tenemos que cooperar para el desarrollo, con independencia, con autonomía, potenciando todo lo que significa el pueblo de América del Norte”, enfatizó López Obrador.
En tanto, Joe Biden dijo que tratará a México como un “igual” porque ambos países son “más fuertes” cuando trabajan juntos.
“Vemos a México como un igual, no como alguien que está al sur de nuestra frontera”, afirmó Biden al comienzo de la reunión virtual.
“Ustedes son nuestros iguales, y lo que ustedes hacen, y el éxito que tengan, tiene un impacto drástico en lo que ocurra en el resto del continente”, añadió.
Sentado entre una bandera estadounidense y una mexicana en el salón Roosevelt de la Casa Blanca, Biden aseguró estar “encantado” de conversar con López Obrador, el segundo líder de otro país con el que se reúne virtualmente desde que llegó al poder en enero, tras su encuentro virtual de la semana pasada con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
“Estados Unidos y México son más fuertes cuando trabajamos juntos. No hemos sido vecinos perfectos el uno con el otro, pero somos más seguros cuando trabajamos juntos”, subrayó.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.