La India ha registrado 401.993 nuevos casos de covid-19 en las últimas 24 horas, su cifra récord desde que empezó la pandemia, según lo comunicó este sábado el ministerio de Salud y Bienestar Familiar del país asiático, recogen medios locales.
En ese mismo período 3.523 personas sucumbieron a la enfermedad, mientras que 299.988 pacientes fueron dados de alta.
Según datos oficiales, un total de 211.853 personas han fallecido por coronavirus en la India, mientras que la cifra de infectados asciende a 19.164.969, de los que más de 3,2 millones son casos activos. Por el momento, 15.684.406 pacientes se han recuperado.
Cifras preocupantes
La India ha contabilizado más de 200.000 casos al día desde el pasado 15 de abril, siendo Maharashtra el estado más afectado por contagios y número de casos activos.
La incidencia crítica del covid-19 se ha traducido en escasez de camas de hospital, oxígeno médico y medicamentos antivirales cruciales.
En medio del empeoramiento de la situación, el epidemiólogo jefe de EE.UU., Anthony Fauci, ha instado al país asiático a considerar la opción de usar su Ejército para ayudar a combatir la pandemia, ya que —asegura— la situación es «como una guerra». Asimismo, recomendó llevar a cabo una cuarentena a nivel nacional durante unas semanas.
A aumentar el caos generado por la pandemia contribuyeron la semana pasada dos accidentes mortales en sendos centros hospitalarios indios. El primero ocurrió en Nashik, donde una interrupción del suministro de oxígeno a causa de una fuga provocó la muerte de 24 pacientes con coronavirus. Dos días después, al menos 13 personas murieron en un hospital de la localidad de Virar, a consecuencia de un incendio registrado en la unidad de cuidados intensivos.
Críticas a las autoridades
El ministro indio de Salud indio, Harsh Vardhan, declaró esta semana que, antes de que creciera la cifra de infectados, muchas personas «se volvieron negligentes» y dejaron de seguir las reglas para contener la propagación del virus.
Según los expertos, la nueva variante del virus detectada en territorio indio podría haber contribuido a la rápida propagación de la enfermedad.
Las autoridades indias se convirtieron en blanco de críticas por no suspender las elecciones locales y permitir el peregrinaje a la festividad del Kumbhamela, durante la cual millones de devotos se bañaron en el río Ganges. Estos eventos masivos en los que participa gran cantidad de personas podrían haber contribuido a una mayor propagación del coronavirus.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.