Debido al aumento de violencia registrado los últimos días en Tamaulipas, el gobierno de Estados Unidos emitió una alerta de viaje y restringieron las operaciones de su personal oficial en el estado fronterizo.
El comunicado emitido por el Consulado General de EEUU, el pasado 25 de junio, aseguró que esta decisión se tomó por el “cártel de violencia” existente en la llamada “frontera chica”, además de que podrían sufrir “delitos y secuestros”.
“A la luz de la violencia que ocurrió en Reynosa el 19 de junio, el personal del gobierno de los Estados Unidos en Reynosa está temporalmente restringido de las operaciones de campo y los movimientos oficiales que no sean del hogar al trabajo”, se lee en el comunicado oficial.
Las personas que elijan viajar a las entidades de Reynosa, Río Bravo y áreas circundantes, deberán permanecer atentos y mantener un mayor estado de conciencia, esto debido a la “posibilidad de violencia entre las facciones rivales del cartel”.
El consulado recomendó evitar viajes innecesarios a la frontera chica (Foto: Fiscalía de Tamaulipas)
El Consulado aconsejó estar alerta durante el día, evitar viajar de noche, revisar información sobre planes de seguridad personales, supervisar noticias locales, seguir las instrucciones de los funcionarios y mantener informados a familia y amigos sobre el paradero.
Cabe recordar que el pasado 17 de junio, el Departamento de Estado de Estados Unidos actualizó las alerta de viaje a México para sus ciudadanos, y destacó el riesgo en Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Tamaulipas, entidades a las cuales designó un nivel 4, pues la presencia del crimen organizado representa un enorme riesgo.
De acuerdo con La Fiscalía de Tamaulipas, la reciente masacre en Reynosa, que dejó como saldo 15 muertos, es derivada de un pleito entre miembros del Cártel del Golfo.
Esta organización criminal, que durante años controló la llamada frontera chica entre Tamaulipas y Texas (EEUU), quedó muy debilitado desde la captura de Mario Armando Ramírez Treviño, alias el Pelón y/o X-20, en 2013. La detención provocó la fractura de la célula y se construyeron Los Metros, Los Ciclones y Rojos.
Una fractura en el Cártel del Golfo provocaría la violencia en Tamaulipas (Mapa: Infobae México/Jovany Pérez Silva)
La primera opera principalmente en los municipios de Reynosa, Mainero, Villagrán, Hidalgo, Miguel Alemán, Camargo, Gustavo Díaz Ordaz.
Por su parte, Los Ciclones y su brazo armado los Escorpiones controlan las regiones de Matamoros, San Fernando, Río Bravo, Valle Hermoso y Victoria. En tanto, la célula delictiva de Los Rojos se encuentran asentados en Altamira, Tampico y Ciudad Madero.
La ruptura del Cártel del Golfo también provocó el nacimiento de la facción llamada Panteras, identificados en las zonas de Abasolo, Soto de la Marina, Aldama y González. Asimismo, en el estado operan otros dos grupos criminales: Los Zetas, con su brazo armado Zetas Vieja Escuela y el Cártel del Noreste.
También se han manejado algunas versiones donde se señala que esta ola de violencia es parte de una estrategia para intentar frenar la entrada del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), grupo liderado por Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, a la entidad, de acuerdo con la última publicación del semanario Proceso.
Sin embargo, hasta el momento, la única información oficial emitida fue por parte de la fiscalía estatal. Aunque también comenzó a circular un video en redes sociales, donde se observa a un supuesto sicario del Cártel del Golfo, postrado en cama, asegurando quelos ataques fueron “para quesecalentara la plaza”.
El fragmento de menos de un minuto muestra el interrogatorio al detenido, identificado como Jonathan “R”, quien vincula a Juan Miguel Lizardi Castro, el Miguelito 56 y/o Maestrín, como responsable de dar las órdenes para asesinar en las colonias Bienestar, Almaguer, Fidel Velázquez, Lampacitos y Unidad Obrera.
Terror en la carretera Chihuahua-Ojinaga: hallan cuerpo desmembrado, calcinado y con armamento de alto poder
La violencia volvió a dejar su firma con sangre en una de las rutas más transitadas del estado. La mañana de este miércoles, autoridades fueron alertadas por la presencia de restos humanos en la carretera Chihuahua-Ojinaga, a la altura de un tramo despoblado. Aunque el reporte inicial hablaba de dos cuerpos, elementos de la Policía Estatal confirmaron que se trataba de un solo cadáver, desmembrado y calcinado.
El hallazgo fue aún más inquietante por los objetos encontrados junto a los restos. En el sitio yacían una cabeza humana, dos brazos cercenados, dos fusiles de asalto, tres cargadores, un chaleco porta placas color negro y dos identificaciones oficiales a nombre de Gerardo V. V., con domicilio en Villa Vicente Guerrero, Durango. Las piezas humanas estaban esparcidas sobre el pavimento y zonas aledañas, en lo que se presume fue una ejecución con mensaje entre grupos criminales.
La escena fue asegurada por agentes estatales, mientras que minutos después arribaron elementos de la Fiscalía General del Estado y personal de la Guardia Nacional, quienes desplegaron un operativo de resguardo del área e iniciaron las primeras diligencias. Hasta el momento, no se ha confirmado oficialmente la identidad de la víctima ni el móvil del crimen.
La brutalidad del caso, sumada a la presencia de armamento militar, refuerza las líneas de investigación relacionadas con el crimen organizado. Las autoridades no descartan que la víctima haya pertenecido a alguna célula delictiva y que su ejecución esté vinculada con ajustes de cuentas o disputas territoriales entre cárteles que operan en la región.
Este hecho se suma a una cadena de actos violentos registrados en el estado durante las últimas semanas, encendiendo nuevamente las alarmas sobre la inseguridad en zonas carreteras y la capacidad de respuesta institucional. Las autoridades han pedido colaboración ciudadana para recabar información que permita dar con los responsables, aunque reconocen que el nivel de violencia exhibido en este caso habla de una estructura criminal con acceso a logística, armamento y recursos.
El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense para su análisis e identificación definitiva, mientras la Fiscalía mantiene abiertas varias líneas de investigación. Entretanto, la carretera Chihuahua-Ojinaga, vital para el comercio y la movilidad regional, se convierte en un nuevo escenario del terror con una advertencia implícita para quienes disputan el control de la zona.