Al menos cuatro personas resultaron heridas por disparos este miércoles durante una pelea en el instituto de secundaria de Timberview en la localidad de Arlington, en Texas (EE.UU.), donde el autor de los tiros se dio a la fuga.
En una rueda de prensa, el jefe adjunto de la Policía de Arlington, Kevin Kolvye, explicó que una de las víctimas sufrió heridas leves y rechazó tratamiento médico, mientras que los otros tres fueron llevados a un hospital
Kolvye precisó que tres de los heridos son estudiantes y el otro es un adulto que creen que podría ser un profesor.
La policía identificó a Timothy George Simpkins, de 18 años, como principal sospechoso del suceso.
“Llame al 911 si conoce el paradero de Timothy George Simpkins, de 18 años, que puede estar conduciendo un Dodge Charger 2018 Silver con matrícula PFY-6260?, escribió la policía de Arlington en Twitter junto a una foto del joven.
El sospechoso señalado por la policía
Según las investigaciones preliminares, las autoridades creen que hubo un pelea en una de las aulas en la segunda planta entre dos estudiantes y que uno de los dos empleó un arma.
La Policía indicó que no se trata de un suceso de violencia fortuita en el centro, sino que fue una pelea.
Durante el suceso se cerraron los accesos al centro educativo y los estudiantes y profesores estuvieron confinados en las aulas y oficinas del instituto.
Imágenes de televisión en vivo mostraron una fuerte presencia policial alrededor de la escuela, con oficiales armados registrando el extenso campus y camiones de bomberos en la escena.
Las imágenes en vivo también mostraron una línea de ambulancias y vehículos del departamento de bomberos en el exterior de la escuela, pero no se pudo ver a las personas que estaban siendo tratadas por lesiones. Una persona publicó en las redes sociales un video que mostró a alumnos escondidos en un aula mientras afuera se oyen disparos.
También se podía ver una flota de autobuses escolares amarillos preparándose para evacuar a los estudiantes de la escuela.
Timberview tiene unos 1.900 estudiantes de noveno a duodécimo grado. El extenso complejo se inauguró en 2004.
(Captura de pantalla)
El suceso se produjo pocos días después de un tiroteo en una escuela autónoma de Houston en la que quedó herido un administrador.
Después de un año dedicado principalmente a aprender en línea, las escuelas estadounidenses han regresado al aula, reviviendo el miedo a los tiroteos en el campus, con múltiples incidentes a pequeña escala reportados en las últimas semanas.
Más de 248.000 estudiantes han estado expuestos a la violencia con armas de fuego en las escuelas desde que 13 personas murieron en la masacre de Columbine High School en Colorado en 1999, según datos compilados por The Washington Post.
La cifra incluye a los involucrados, incluyendo los testigos y los que se vieron obligados a evacuar las instituciones educativas cuando estallaron los disparos.
En 2018, hubo 25 tiroteos en escuelas y 23 más en 2019.
El tiroteo escolar reciente más mortífero en los Estados Unidos tuvo lugar en 2018, cuando 17 estudiantes murieron en un tiroteo de un ex alumno en una escuela secundaria en Parkland, Florida.
El mismo año ocurrió el tiroteo escolar más mortífero en Texas, cuando un joven de 17 años armado con una escopeta y una pistola abrió fuego en Santa Fe High School cerca de Houston, matando a 10 personas, la mayoría de las cuales eran estudiantes.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.