La mayor parte de países latinoamericanos siguen anclados en la parte baja del Índice de Percepción de la Corrupción 2012 (CPI) publicado hoy, mientras que la región en conjunto mantiene una nota peor que el promedio global.
“La corrupción afecta el buen funcionamiento de los programas sociales, influye en las elecciones, debilita la democracia, fomenta la violencia y permite operar al crimen organizado, manteniendo a la región como una de las más desiguales y violentas del mundo”, resume TI.
De los 176 países calificados en una escala del cero (muy corrupto) al 100 (muy transparente), el latinoamericano mejor ubicado vuelve a ser Chile, que sube dos puestos desde el año pasado y ocupa el lugar 20 con una calificación de 72 puntos, justo detrás de Estados Unidos. En el mismo lugar y con el mismo puntaje figura Uruguay, que mejora cinco posiciones desde el informe anterior.
En el extremo opuesto se encuentran Venezuela y Haití, entre los diez más corruptos del mundo al ocupar el lugar 165 con apenas 19 puntos. Sin embargo, Venezuela escala siete puestos desde 2011 y Haití diez.
Además de Chile y Uruguay, aparecen en la primera mitad de la tabla Costa Rica (puesto 48), Cuba (sube tres puestos hasta el 58), Brasil (sube cuatro puestos hasta el 69) y El Salvador, Panamá y Perú (todos en el 83).
En la última mitad se sitúan Colombia (con una fuerte caída de 14 lugares hasta el 94), Argentina (cae dos hasta el 102), Bolivia (105), México (pierde cinco lugares hasta el 105), Guatemala (113), Repúblicana Dominicana (118), Ecuador (118), Nicaragua (130), Honduras (133) y Paraguay (150), además de Haití y Venezuela.
Las conclusiones del informe también son alarmantes a nivel global. Según TI, dos terceras partes de los países recogidos en el informe entran en la categoría de “muy corruptos” al lograr menos de 50 puntos.
“El creciente clamor a los gobiernos corruptos forzó la destitución de varios líderes durante el año pasado. Sin embargo, ahora que la situación comienza a calmarse, resulta evidente que en muchos países el soborno, el abuso de poder y los acuerdos secretos siguen estando muy presentes”, señala el documento.
Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda vuelven a ocupar los primeros puestos del índice con 90 puntos, mientras que Afganistán, Corea del Norte y Somalia lo cierran con ocho.
TI destaca que los gobiernos surgidos tras la ola de revueltas conocidas como “primavera árabe” no mejoraron el nivel de transparencia en la región.
Los países más afectados por la crisis de deuda en la eurozona también mantienen bajos puntajes y los problemas financieros parecen impulsar la corrupción, analiza el organismo.
Grecia, por ejemplo, cayó del puesto 80 en el informe de 2011 al 94 este año. Italia se encuentra en el lugar 72. Por el contrario, España mejora un puesto con respecto al año pasado y se sitúa en el puesto 30 con una percepción de la corrupción de 65 puntos.
Otros países occidentales industrializados como Suiza, Canadá, Australia, Suecia y Holanda siguen dominando el “top ten” de los más limpios este año.
Por el contrario China, la segunda mayor economía del mundo, se sitúa en el puesto 80 con apenas 39 puntos.
Estados Unidos, primera economía mundial, logra el puesto 19, mientras que Japón se encuentra en el 17. La primera potencia europea, Alemania, es décimo tercera.
“La corrupción es el problema mundial del que más se habla”, señaló Cobus de Swardt, director ejecutivo de TI.
“Las principales economías del mundo deberían también dar el ejemplo y asegurarse de que sus instituciones sean completamente transparentes y que sus líderes rindan cuentas por sus decisiones”, reclamó
You must be logged in to post a comment Login