La primera ministra de Finlandia Sanna Marin dijo que no tomó ninguna droga durante una fiesta “salvaje” en una casa privada y añadió que no hizo nada malo al soltarse el pelo y festejar con sus amigos.
Un video publicado en una red social muestra a seis personas bailando e imitando una canción delante de una cámara, incluida la primera ministra finlandesa. Más adelante en el video, Marin, de 36 años, está de rodillas en lo que parece ser la pista de baile con los brazos detrás de la cabeza bailando mientras imita una canción.
Me decepciona que se haya hecho público. Pasé la noche con amigos. De fiesta, bastante salvaje, sí. Bailé y canté”, dijo el jueves a la emisora finlandesa YLE.
“Yo no he consumido drogas, ni nada que no sea alcohol. He bailado, cantado y salido de fiesta y he hecho cosas perfectamente legales. Tampoco he estado en una situación en la que supiera que otros lo hubieran hecho”, dijo Marin, según el periódico Hufvudstadsbladet.
No estaba claro cuándo se celebró la fiesta, a la que supuestamente asistieron Ilmari Nurminen, miembro del Eduskunta, o Parlamento, por el Partido Socialdemócrata de Marin y la cantante finlandesa Alma.
Marin —que en diciembre de 2019 se convirtió en la primera ministra más joven de la historia de Finlandia— dijo que pasa su tiempo libre con amigos al igual que otras personas de su edad y que pretende seguir siendo la misma persona que antes.
“Espero que se acepte. Vivimos en una democracia y en las elecciones todo el mundo puede decidir estas cuestiones”, comentó, según YLE.
Los críticos han señalado que Finlandia, que comparte una frontera terrestre de mil 340 kilómetros (832 millas) con Rusia, enfrenta altos precios de la electricidad, entre otros problemas derivados de la invasión rusa de Ucrania. Recientemente, el país abandonó su postura neutral de mucho tiempo y solicitó su ingreso en la OTAN.
En julio, Marin asistió a un popular festival de rock finlandés. En diciembre se disculpó públicamente tras salir de fiesta hasta las 4 de la mañana sin su teléfono del trabajo, por lo que no se le informó de que había estado en estrecho contacto con una persona que había dado positivo en una prueba de Covid-19. Ella no dio positivo al someterse al examen.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.