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«La gemela perdida de Dua Lipa»; Alejandra Silva originaria de Nuevo León causa sensación en redes

Una chica de Nuevo León se volvió viral en redes sociales y saltó rápidamente a la fama luego que usuarios señalaran su parecido con la cantante Dua Lipa, por lo que muchos han acudido a su cuenta de Instagram para comparar su físico con el de la artista británica.

Se trata de la mexicana Alejandra Silva Cano, quien es originaria de Nuevo León, y quien se ha ganado el apodo de “la gemela perdida de Dua Lipa”, pues no han sido pocos quienes se percataron de su parecido luego de verla conduciendo en un programa local en el municipio de Cadereyta.

De hecho, los primeros reportes indican que Alejandra Silva se dedica a modelar y también se encuentra dando sus primeros pasos como influencer por lo que sus seguidores siguen aumentando en sus redes sociales.

Asimismo, entre piropos y comparaciones con la intérprete de “New rules”, la chica se va abriendo camino, lo que le ha permitido recibir mensajes donde le piden colaboraciones.

Aunado a ello, han sido varias las imágenes que la “gemela” de Dua Lipa de Nuevo León comparte con uniforme de color rojo y amarillo, el cual es distintivo de una famosa cadena de tiendas de conveniencia, sin embargo, ella jamás ha confirmado o negado que sea trabajadora de dicho negocio.

Mientras algunos le preguntan en qué sucursal trabaja para irla a buscar, o bromean diciendo que si ella está no les importa que la segunda caja no esté abierta, Alejandra Silva Cano guarda silencio y sigue compartiendo fotos.

Este no sería el primer uniforme que usa, pues también tiene una foto con el uniforme de una cadena de cines y de un restaurante de pollo.

Finalmente, Alejandra Silva Cano comenzó a publicar en Instagram en el año 2018, y hasta la fecha acumula más de 58 mil likes.

Fuente: reporteindigo.com

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Explota cohete Starship en Texas: nuevo revés para SpaceX a solo un año de su misión a Marte

Una nueva explosión sacudió la noche del miércoles 18 de junio el cielo del sur de Texas, cuando el cohete Starship de SpaceX estalló durante pruebas en la base de lanzamiento de Brownsville, en lo que la compañía calificó como “una anomalía mayor”. La gigantesca nave de 400 pies de altura —pilar del ambicioso plan de Elon Musk para colonizar Marte— sufrió un fallo durante su test en tierra, generando una enorme bola de fuego y escombros visibles desde varios kilómetros a la redonda.

Aunque no se reportaron heridos, SpaceX pidió a la población mantenerse alejada de la zona mientras equipos de seguridad trabajan para asegurar las instalaciones de Starbase y sus alrededores. “No existen riesgos para las comunidades cercanas”, aseguró la empresa en un comunicado publicado en su cuenta de X.

La causa de la explosión aún está bajo investigación, pero Elon Musk adelantó en redes sociales que los datos preliminares apuntan al fallo de un contenedor presurizado de nitrógeno (COPV, por sus siglas en inglés) en la bahía de carga. “Si se confirma, sería la primera vez que este diseño falla de esa manera”, añadió el fundador de SpaceX.

El incidente se suma a una serie de contratiempos recientes para el programa Starship. Apenas el 27 de mayo, durante su noveno vuelo de prueba, la nave se desintegró sobre el océano Índico tras perder el control 46 minutos después del despegue. En enero y marzo también se registraron explosiones durante vuelos de ensayo, con espectaculares desintegraciones en el cielo de Florida y el Caribe. En esas ocasiones, la etapa superior —donde viajarían astronautas y carga en futuras misiones— logró separarse, pero falló en completar su trayecto.

El Starship está diseñado como un sistema de transporte completamente reutilizable, capaz de regresar a la Tierra después de cada misión. Su objetivo final: llevar humanos y suministros al espacio profundo, con un enfoque particular en Marte. Musk ha reiterado que espera lanzar una misión no tripulada al planeta rojo en 2026, como parte del calendario para establecer presencia humana permanente fuera de la Tierra.

A pesar de los reveses, entre junio y noviembre de 2024, tres pruebas exitosas lograron que Starship orbitara la mitad del planeta y aterrizara sin contratiempos en el océano Índico, generando expectativas positivas. No obstante, los recientes fallos han encendido alarmas sobre la confiabilidad del sistema a tan solo un año de la fecha fijada para iniciar su misión interplanetaria.

Las imágenes captadas por testigos y difundidas el jueves muestran al prototipo Starship 36 envuelto en llamas tras sufrir al menos dos explosiones consecutivas durante la prueba estática, que se realizaba horas después de que la compañía compartiera un video celebrando la activación de uno de sus motores en simulación de ignición en el espacio.

SpaceX no ha anunciado si este nuevo revés alterará su calendario de lanzamientos, pero el incidente representa otro desafío técnico —y mediático— para una empresa que apuesta su prestigio al futuro de la exploración espacial. Mientras tanto, el sueño de colonizar Marte se mantiene en pie, aunque bajo la sombra de explosiones que, una y otra vez, recuerdan que alcanzar el cosmos sigue siendo una tarea plagada de riesgos.

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