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Opinión

La sombra. Por Raúl Saucedo

Agenda cíclica

Han trascurrido ya seis meses del proceso electoral en México (Desde que se instaló la Asamblea General del INE) y 15 días de los procesos federales (Presidencia de la República, Senado y Cámara de Diputados) se ha registrado en promedio una agresión diaria contra personas vinculadas con el ámbito político, esto según el indicador del reporte más reciente de violencia política elaborado por Integralia,consultora en asuntos públicos.

La firma Integralia ha contabilizado 182 incidentes de violencia política, asociados a 238 víctimas, es decir, 1,3 víctimas cada día. Durante los últimos 6 meses.

En este conteo entran funcionarios, exfuncionarios, políticos, expolíticos, aspirantes a cargos de elección, familiares y víctimas colaterales dentro del ámbito político. Los asesinatos representan el 48,3% de las agresiones totales, los atentados el 21,8%.

El informe indica que, del total de agresiones, 44 fueron contra aspirantes o candidatos a cargos de elección popular, al menos hay un aspirante agredido cada cuatro días (Dichos aspirantes son de diferentes partidos).

El partido oficialista, que hasta la fecha gobierna el país y 21 estados, concentra el mayor número de las agresiones con el 31,8%. Esto quizá por la cercanía en el ámbito de toma de decisiones en el ejercicio del poder.

Los indicadores arrogan como elemento prioritario de la violencia política son los aspirantes a cargos municipales(Alcaldes, Síndicos, Regidores) siendo el 54,5% de las agresiones dirigidas a este ámbito pues representan acceso directo al control de las economías y toma de decisioneslocales.

Guerrero, Michoacán y Chiapas encabezan la lista de los estados con más víctimas totales dentro de los indicadores antes mencionados. El asesinato es la agresión recurrente con el 38,6% de los casos, seguido de las amenazas con el 27,3% y los atentados con el 18,2%, y el resto, un 15,9%, no se especifica.

Hasta la fecha no hay un conteo oficial de víctimas de violencia politica en México y los registros los elaboran principalmente consultoras o asociaciones civiles.

La secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno Federal, dijo el 5 de marzo que la dependencia atendió, hasta entonces, 23 solicitudes de protección de candidatos, entre ellas las de los tres aspirantes presidenciales, Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez; tres aspirantes a gobernador, siete al Senado y 10 a diputaciones federales.

Dicha secretaria preciso que el Gobierno federal se responsabiliza de los candidatos a la presidencia, a las nueve gubernaturas en juego y a los aspirantes a una diputación federal o el Senado, mientras que los estados son responsables de la seguridad de candidatos a cargos locales.

La violencia en política no es un suceso nuevo en México, si consideramos la consolidación del partido hegemónico del siglo XX en México después de magnicidios post revolucionarios, la persecución y casi erradicación de movimientos sociales de izquierda en los años 60`s, 70`s y 80´s y como dejar de paso el fatídico y lejano 1994 donde “la culebra” resonaba previo a la entrada de la democracia en México, (Como dato este suceso aunó a un 72% de participación electoral)  

México es complejo en su dinamismo político, social y económico, como elemento dentro del sistema político mexicano deseo que todos aquellos que ejercen la política con fines de mejorar nuestras comunidades y naciones pueden ver realizados sus sueños personales y colectivos y que la sombra de esta agenda cíclica de México no los alcance.

@Raul_Saucedo

rsaucedo@uach.mx

Opinión

Ken Salazar: ¿Embajador o Actor de Telenovela? Por Caleb Ordoñez T.

¡Ah, Ken Salazar! El embajador de Estados Unidos que nos ha dejado perplejos con sus altibajos políticos, sus declaraciones dignas de un guión de serie, y su relación complicada con la Cuarta Transformación. Si algo ha demostrado este diplomático es que puede pasar de ser el mejor amigo de la 4T a su crítico más feroz, dependiendo de cómo soplen los vientos en Washington. Vamos, que ni él mismo parece saber en qué equipo juega.

La historia de Salazar en México comenzó con un apoyo incondicional a la estrategia de seguridad de López Obrador. “Queremos ayudar a México”, decía con entusiasmo. Todo iba viento en popa: AMLO estaba contento, Salazar estaba contento, y la relación bilateral estaba, si no perfecta, al menos pacífica. Pero, de repente, Salazar empezó a lanzar críticas, como si su personaje hubiese sufrido un cambio drástico de dirección. ¿Qué pasó? Pues, para sorpresa de todos, ¡Donald Trump volvió al juego! Y al parecer, eso trajo consigo una versión “Ken Salazar 2.0”, una más crítica y menos amigable.

Caleb Ordoñez T.

Caleb Ordoñez T.

La situación llegó al punto de que Marcelo Ebrard, nuestro ex canciller, tuvo que enviarle un mensaje directo (aunque con tono irónico y de pulida diplomacia): “Dear Ken, what are you talking about?”. ¿Qué habrá pensado Salazar al leer esa frase? Porque para el diplomático promedio, una indirecta así es casi un grito. ¡Imagínense! Si hasta los memes en Twitter le daban vuelta, como si se tratara de una pelea entre amigos que ya no se soportan.

Por si fuera poco, Sheinbaum, en una de sus mañaneras, no perdió la oportunidad de hacer un comentario jocoso sobre los vaivenes del embajador. “Es que Ken se confunde”, dijo en tono irónico, como quien habla de un viejo amigo algo despistado. Claro, el comentario causó risas entre los presentes, pero también dejó en claro que el equipo de AMLO ya no se toma muy en serio las críticas de Salazar. Tal parece que la figura de Salazar es ahora vista como una especie de personaje excéntrico, más digno de un episodio de sátira política que de una embajada.

Pero lo realmente intrigante es: ¿quién podría suceder a Ken Salazar si Trump llega a la Casa Blanca nuevamente? ¿A quién enviaría el expresidente a continuar esta telenovela diplomática? Tal vez podríamos ver a alguien de su círculo más leal, como un Mike Pompeo, experto en lanzar dardos con una sonrisa, o, por qué no, a alguien más peculiar y polémico, como un Rudy Giuliani, quien seguramente haría de la embajada un espectáculo.

La verdad, sea quien sea, seguro nos traerá más drama. Porque, al parecer, la embajada de Estados Unidos en México ya no es un puesto diplomático, sino un auténtico reality show político, donde el que llega, o es nuestro mejor amigo, o el villano de la temporada. Así que preparemos las palomitas, porque la novela de Ken Salazar, o de su posible sucesor, seguro aún nos tiene reservadas muchas sorpresas.

Y un edificio nuevo.

La embajada de Estados Unidos en México está casi lista, con un avance notable, y no podemos evitar preguntarnos: ¿vendrá Trump a cortarle el listón si gana en 2024?

Imaginemos el espectáculo: Sheinbaum dando la bienvenida en la mañanera y un Trump republicano hablando de “buenos vecinos” (entre ironías y sonrisas forzadas). ¿Cómo gestionarán esta relación diplomática? Seguro veremos un juego interesante de diplomacia y un poco de sarcasmo, donde ambos bandos tendrán que bailar al ritmo de las relaciones exteriores. Con Trump y Sheinbaum, podríamos estar ante el evento del año… o de la más extraña comedia política.

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