El terremoto interno que sacude a Red Bull Racing parece haber alcanzado su punto más crítico: la escudería de Milton Keynes estaría dispuesta a dejar ir a su máxima estrella, Max Verstappen, sin oponer resistencia significativa.
Según información revelada por el portal F1-Insider, Red Bull ya no insistirá en retener al tricampeón del mundo y permitiría su salida sin activar cláusulas de rendimiento, aunque con una condición clara: que haya un acuerdo económico que compense la ruptura anticipada del contrato que lo liga al equipo hasta 2028.
La cifra por esa compensación se ha estimado en 100 millones de euros, aunque medios como GPBlog aseguran que el monto podría ser mucho menor, especialmente si Mercedes decide tomar la delantera y hacer una oferta formal por el piloto neerlandés.
La aparente salida de Verstappen coincide con la reciente reestructuración interna del equipo, tras la polémica que terminó con Christian Horner fuera de su cargo. Aunque Laurent Mekies llegó con la misión de evitar la fuga de talentos, su presencia habría sido demasiado tardía para frenar los deseos del piloto de cambiar de escudería.
Mercedes, lista para el golpe de autoridad
Por su parte, La Gazzetta dello Sport reveló que Ola Kallenius, CEO de Mercedes-Benz, ya dio luz verde para fichar a Max Verstappen de cara a la temporada 2026, año clave para la nueva era de la Fórmula 1 con el cambio en los reglamentos técnicos.
El único escollo para concretar el movimiento sería la desvinculación contractual con Red Bull, pero al contar ya con el visto bueno informal del equipo energético, todo indica que un acuerdo entre ambas partes es viable sin necesidad de una disputa legal.
De concretarse, Mercedes asumiría uno de los compromisos financieros más grandes en la historia del deporte, ya que Verstappen es el piloto mejor pagado de la actual parrilla, con un salario estimado de 75 millones de dólares anuales, cifra muy por encima de los 23 millones que recibe George Russell o los apenas 2 millones que ganaría el joven Andrea Kimi Antonelli.
La salida de Verstappen marcaría un antes y un después para Red Bull, que ha dominado la Fórmula 1 gracias al talento del neerlandés, y al mismo tiempo, abriría un nuevo capítulo dorado para Mercedes, en busca de regresar a lo más alto del campeonato