La coronación de Fátima Bosch Fernández como Miss Universe México 2025 fue más que una victoria en el escenario. La joven de 25 años, originaria de Tabasco, ha convertido su historia de vida en un mensaje de inspiración para quienes enfrentan desafíos desde la infancia.
En una entrevista previo a la final del certamen, la modelo confesó que vivió una niñez difícil marcada por tres condiciones poco comprendidas: TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), dislexia e hiperactividad.
“Me hacían todo tipo de bullying y tú como niño que tienes dislexia, déficit de atención e hiperactividad, no entiendes por qué el cerebro no entiende. Pero estos niños tienen otros dones”, reveló en una charla.
La reina de belleza recordó que desde los ocho años asumió un compromiso personal con su educación. “Tengo que estudiar 20 veces cada cosa, no puedo salir el fin de semana a la fiesta porque tengo que tener tutores y lo voy a hacer, esto fue lo que me tocó. En ningún momento me victimicé (…) Me costó el triple, lo logré, jamás reprobé un examen”, aseguró.
Su testimonio ha generado empatía en redes sociales, donde usuarios la han elogiado por hablar abiertamente de neurodivergencia y por utilizar su plataforma para visibilizar la importancia de la inclusión educativa.
Los trastorno que le fueron diagnosticados a Fátima Bosch pueden provocar desafíos en el entorno escolar y social, afectando la rutina y las relaciones con el entorno.
El TDAH es un trastorno neurobiológico que altera el funcionamiento de las áreas cerebrales responsables de la función ejecutiva. Se manifiesta a través de inatención, olvidos, pérdidas frecuentes de objetos, hiperactividad con inquietud física y verbal, y impulsividad, reflejada al interrumpir conversaciones o asumir riesgos sin medir consecuencias.
Aunque la causa exacta permanece desconocida, estudios atribuyen su origen a una combinación de factores genéticos y ambientales.
En cuanto a la dislexia, especialistas coinciden en que involucra dificultades para reconocer palabras, errores de ortografía y obstáculos en la decodificación de los sonidos del lenguaje. Los síntomas suelen identificarse en la etapa inicial de aprendizaje escolar y afectan el rendimiento en lectura y escritura.
La hiperactividad, característica principal del TDAH, se expresa como movimiento constante y dificultad para permanecer sentados en situaciones que lo requieren. La convivencia de ambos trastornos puede provocar una mayor dificultad para concentrarse.