Ciudad de México.— La tragedia provocada por la explosión de una pipa de gas LP en Iztapalapa continúa cobrando víctimas. Este domingo, la Secretaría de Seguridad Pública capitalina confirmó que la cifra de fallecidos ascendió a 27.
Las autoridades detallaron que, hasta el momento, 39 personas han sido dadas de alta tras recibir atención médica, mientras que 18 continúan hospitalizadas en distintos centros de la Ciudad de México.
Entre los heridos destaca el caso de la pequeña Jaclyn Azulet Carrillo Matías, de apenas 2 años, quien fue trasladada a Texas para recibir atención especializada en el Shriners Hospitals for Children.
El accidente, ocurrido días atrás, desató escenas de caos y desesperación entre vecinos de la zona, quienes vivieron momentos de pánico al registrarse la fuerte explosión que alcanzó varias viviendas y vehículos cercanos.
La tragedia ha dejado una profunda huella en la comunidad, donde familiares de las víctimas exigen justicia y mayor seguridad en el manejo de este tipo de unidades de transporte de gas, que circulan cotidianamente por zonas densamente pobladas.
Las autoridades mantienen las investigaciones abiertas para determinar responsabilidades y establecer medidas que prevengan un desastre similar en el futuro.