La derrota de Saúl “Canelo” Álvarez frente a Terence Crawford sigue generando debate en el mundo del boxeo. Aunque la mayoría de los análisis han destacado la brillante actuación del estadounidense, quien mostró una precisión y resistencia excepcionales al subir dos divisiones de peso, algunas voces críticas apuntan a que el mexicano no llegó en condiciones óptimas a la pelea.
Uno de los más duros en su evaluación fue Ángel García, padre y entrenador del boxeador Danny García, quien aseguró que Canelo lució “quemado” y físicamente agotado durante el combate. En entrevista con FightHype, el experimentado entrenador señaló que el alto ritmo de actividad del mexicano —con tres peleas en un solo año— podría haberle pasado factura. “Eso es demasiado para un peleador con su historial y los años que lleva en el ring”, afirmó.
Álvarez, de 35 años, inició su carrera profesional a los 15, acumulando dos décadas de combates de alto nivel. García recordó que las batallas más exigentes, como las que sostuvo con Gennadiy Golovkin, dejaron secuelas físicas evidentes. Añadió que el jalisciense enfrenta ahora una cirugía de codo, lo que demuestra que no estaba en su mejor estado para medirse ante un rival tan técnico y veloz como Crawford.
“Canelo fue inteligente al no enfrentarse a David Benavidez, pero debió aplicar esa misma inteligencia con Crawford. No debió haber tomado esa pelea”, sentenció García.
Mientras tanto, la atención se centra en el futuro del estadounidense. El promotor Eddie Hearn aseguró en entrevista con TMZ Sports que el próximo gran reto para Crawford podría ser Jaron “Boots” Ennis, a quien considera el único capaz de destronarlo. “Será el número uno libra por libra durante los próximos años”, afirmó Hearn, reavivando el debate sobre quién podrá detener al nuevo rey del boxeo mundial.