El alcalde de Chihuahua, Marco Bonilla, negó de manera contundente las acusaciones del regidor de Morena, Miguel Riggs, quien afirmó que tanto él como la gobernadora Maru Campos habrían recibido recursos de la gasolinera Carvel para financiar sus campañas políticas.
“Falso, lo niego rotundamente, en lo absoluto, y eso es fácil de revisar”, declaró Bonilla, al destacar que su administración se caracteriza por la transparencia. Invitó a los críticos a consultar el padrón de proveedores del Gobierno Municipal, para comprobar si existe algún contrato con dicha empresa. Además, retó a revisar el portal de contrataciones del Gobierno del Estado durante la gestión de Javier Corral, cuando —según él— sí hubo vínculos con Carvel.
El edil precisó que la gasolinera señalada fue proveedora en la Fiscalía General del Estado y en la Secretaría de Seguridad Pública Estatal durante la administración anterior, e hizo referencia a antecedentes administrativos relacionados con Carvel Parque El Platanito.
Bonilla también recordó un episodio en el que agentes ministeriales habrían detenido al entonces director de Desarrollo Humano y Ecología municipal, Gabriel Valdés, en el marco de un proceso legal vinculado con la operación de esa estación de servicio.
Finalmente, el alcalde pidió que se investigue el origen y los intereses detrás de las declaraciones del regidor morenista. “Pregúntenle al regidor quién es su partido político, porque por ahí vamos a descubrir un buen hilo de esta historia”, concluyó.