El Gran Premio de Brasil 2025 marcará un regreso muy esperado para los aficionados del país sudamericano: por primera vez en siete años, un piloto brasileño competirá en casa. Gabriel Bortoleto, de la escudería Sauber, será el encargado de devolver la bandera verdeamarela a la parrilla de la Fórmula 1, en el histórico circuito de Interlagos.
La última participación constante de un piloto brasileño fue en 2017, cuando Felipe Massa se despidió de la categoría tras una exitosa trayectoria con Williams. Desde entonces, solo Pietro Fittipaldi tuvo una aparición breve en 2020. Con Bortoleto, Brasil recupera su representación en el máximo nivel del automovilismo, en un país que ha forjado campeones y leyendas.
A sus 21 años, Bortoleto se convertirá en el piloto número 33 de Brasil en competir en Fórmula 1. Su debut en Interlagos, uno de los circuitos más emblemáticos del calendario, promete ser un momento especial para los aficionados que anhelaban ver nuevamente a un compatriota en acción.
Brasil cuenta con una rica historia en la categoría, con tres campeones del mundo: Emerson Fittipaldi, Nelson Piquet y Ayrton Senna, cuyos triunfos definieron eras completas. Fittipaldi abrió el camino en los setenta con dos títulos; Piquet dominó en los ochenta con tres coronas; y Senna, convertido en ícono mundial, inmortalizó su legado con tres campeonatos y 41 victorias.
El último gran referente fue Felipe Massa, quien logró 11 triunfos y rozó el título mundial en 2008, en una carrera histórica precisamente en Interlagos. Desde entonces, ningún brasileño ha ganado en casa, aunque cinco lo lograron antes: Fittipaldi, José Carlos Pace, Piquet, Senna y Massa.
Con la llegada de Bortoleto, la afición brasileña revive la ilusión de ver nuevamente un talento local luchar por los puntos en el circuito que lleva el nombre de uno de sus héroes. El rugido de los motores en Interlagos volverá a sonar con acento brasileño.