Arturo Medina, coordinador de los diputados del PRI en el Congreso del Estado, envió un mensaje de solidaridad a las familias de las personas que perdieron la vida en el descarrilamiento del Tren Interoceánico, así como a quienes resultaron heridos, ante un hecho que —dijo— es consecuencia de la corrupción de los López Obrador.
El priista señaló que la tragedia había sido anunciada desde que se conocieron los audios entre los amigos de los hijos de López Obrador, Amílcar Olán y Pedro Salazar Beltrán, quienes habrían aceptado la operación de contratos inflados, la simulación de supervisiones y diversas irregularidades en aspectos técnicos de la obra.
“La alerta ahí estaba, pero el gobierno de Morena decidió, como es su costumbre, privilegiar el negocio de los López Obrador, aun sabiendo que podría terminar en un hecho como el que hoy tiene de luto a 13 familias mexicanas”, enfatizó.
El legislador exigió que se investigue a fondo el hecho y que se castigue con severidad a los responsables, pues consideró que, para que se llegara a esta tragedia, debió existir una cadena de irregularidades y complicidades que comenzó desde la asignación de contratos, derivada del tráfico de influencias con el que los hijos de López Obrador hicieron negocios al amparo del poder que su padre ejerció.
Finalmente, Medina exigió que el caso no sea llevado al terreno de las narrativas y que el aparato del gobierno federal no sea utilizado para desacreditar las voces de quienes exigen justicia, pues —aseguró— es evidente que se trata de un crimen en el que hubo participación de figuras estrechamente relacionadas con las más altas esferas de la 4T.