La transformación que ha tenido El Granillo, que antes era el entronque y hoy es un distribuidor vial, representa un gran beneficio para los pobladores de la zona sur del estado: ahorra tiempo, costos, facilita comercio y brinda una mayor seguridad para los viajantes.
El señor Evaristo Gómez es originario del municipio de San Francisco del Oro, donde vive actualmente con su esposa. Tiene dos hijos: uno de 20 años quien estudia en el Tecnológico de Parral, y el otro está cursando la preparatoria.
Evaristo tiene un pequeño negocio de asaderos los cuales, aparte de vender en el mismo municipio, los distribuye a las zonas aledañas como Guadalupe y Calvo y Santa Bárbara.
“Mis hijos me ayudan mucho gracias a Dios, ellos aparte de estudiar en Parral se encargan de auxiliarme en los viajes para repartir los asaderos, es nuestro negocio familiar, lo traigo desde mis papás”, comparte el señor Gómez.
Este poblador de San Francisco de Oro recuerda todos los cambios que se han dado en El Granillo, antes entronque y ahora distribuidor vial con varios puentes: “En los tiempos del ex gobernador Oscar Flores Sánchez se construyó el camino de San Francisco del Oro a Santa Bárbara, después con el ex gobernador Manuel Bernardo Aguirre se construyó la carretera del Granillo a Guadalupe y Calvo.”
En esta administración estatal se construyó el distribuidor vial el Granillo, que antes era sólo un entronque. Esta obra permite tener mayor agilidad al transporte de personas y carga, facilita viajes a los comerciantes y con eso genera un ahorro tanto de combustible, como de tiempo y ganancias, afirma don Evaristo.
“En mi humilde opinión y hablando también por lo que escucho de la gente del municipio, los beneficios fueron muchos empezando por brindarle una mayor seguridad al automovilista, por que antes era un crucero de tres carreteras (la que va a Guadalupe y Calvo, rumbo a Parral y a Santa Bárbara); ahorita es un distribuidor vial, ya no nos tenemos que parar para esperar que pase el carro que viene de otra carretera, además junto con este distribuidor se hizo una ampliación de Granillo a Santa Bárbara y quedó muy buena la carretera”, describe.
Como padre de un hijo que viaja diario a Parral, donde está cursando sus estudios, Evaristo Gómez dice sentirse más tranquilo por la seguridad de su vástago. Esto, porque anteriormente se presentaban muchos accidentes en el área del entronque y el distribuidor se le hace más seguro y ordenado para las maniobras automovilísticas.
“Esta región tiene futuro, yo creo mucho en la gente de aquí y en la obras que se están haciendo, porque permite que varios municipios se incorporen a las actividades económicas, con el valor actual de los metales y el precio que tiene la madera, así como la nuez y la actividad ganadera propias de los municipios beneficiados en esta construcción”, es así como Evaristo Gómez visualiza la región donde vive y el desarrollo que está teniendo..