Ciudad de México.– Agricultores y transportistas de todo el país convocaron a un paro nacional el próximo lunes 24 de noviembre, ante la falta de acuerdos con el Gobierno federal sobre la fijación de precios para el maíz y la creciente inseguridad en las carreteras.
Eraclio Rodríguez Gómez, dirigente del Frente Nacional para el Rescate del Campo, señaló en conferencia de prensa que los productores rechazan los “supuestos acuerdos” anunciados por las autoridades para subsidiar el precio del grano, al considerar que solo benefician a empresarios y no al campo mexicano.
Desde el Palacio Nacional, Rodríguez Gómez anunció una alianza entre agricultores y transportistas para fortalecer las movilizaciones que han mantenido en los últimos días. “Hay una estrecha relación entre los productores del campo y los transportistas. Si no fuera por ellos, no podríamos llevar los alimentos a las mesas. Y ellos también están siendo agraviados, asaltados y extorsionados en las carreteras”, declaró.
Baltazar Valdez, también integrante del Frente Nacional para el Rescate del Campo, informó que la primera acción conjunta será el paro nacional del 24 de noviembre, que implicará detener el transporte de carga “desde su origen”. Aclaró que no se bloqueará el paso de vehículos privados ni del transporte de pasajeros.
Además, anunció que los manifestantes realizarán la toma de aduanas como medida de presión para ser atendidos por la presidenta Claudia Sheinbaum. Acusó que en los encuentros con el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, solo han recibido “promesas incumplidas”.
David Estévez, presidente de la Asociación Nacional de Transportistas (ANTAC), llamó a sus agremiados a sumarse al paro y acusó al gobierno de falsear las cifras sobre violencia en carreteras. “Seguimos trabajando con miedo e incertidumbre de salir a carretera y no volver a casa”, dijo.
El Frente Nacional para el Rescate del Campo presentó también un pronunciamiento con sus principales demandas, entre ellas el reconocimiento del Estado a la agricultura nacional, la creación de una banca de desarrollo para el sector agropecuario y pesquero, la exclusión de los granos en la revisión del T-MEC prevista para 2026, y la publicación de precios de garantía para los alimentos.
En días recientes, los agricultores han realizado movilizaciones en 25 estados del país, insistiendo en establecer un precio mínimo de 6 mil pesos por tonelada de maíz.