Alemania se impuso 3-1 a Polonia con un gol de Thomas Müller y dos de Mario Götze que situaron a los campeones del mundo en el liderato del grupo D para la clasificación de la Europa.

Tras un comienzo en el que mostró una clara superioridad, al conjunto dirigido por Joachim Löw se le complicó el partido con la reacción de su rival y sólo pudo respirar con tranquilidad cuando Götze sentenció con su segundo gol en el minuto 81.

Alemania tomó ventaja en el minuto 12 por medio de Thomas Müller a centro del lateral izquierdo Jonas Hector que se había colado en el área tras una buena pared con Karim Bellarabi.

El gol se veía venir pues en los primeros minutos Alemania había tenido ya tres buenas llegadas a través de Müller y Bellarabi.

Los alemanes parecían controlar el partido y justo cuando Polonia tenía el primer conato de reacción, en 18 tuvo su primera llegada con un disparo de Grosiki, llegó el segundo gol del equipo de Joachim Löw.

El autor fue Mario Götze que, en el minuto 18, definió desde unos 15 metros de distancia tras entrar al área en una jugada individual.
lemania se sintió cómoda con el resultado parcial y controló el partido con la simple circulación de la pelota, sin apretar con mucha frecuencia el acelerador y a veces abusando del pase hacia atrás.

El tercero tanto germano estuvo a punto de llegar en el 36, Hector y Müller tuvieron dos ocasiones consecutivas, pero justo en ese momento Polonia cobró nueva vida con un contragolpe por la banda derecha que fue capitalizado por Robert Lewandowski, en el minuto 37, al marcar de cabeza a centro de Grosicki.

Con el descuento la historia del partido dio un vuelco y Polonia, que hasta ese momento parecía camino hacia una debacle, se lanzó a buscar el empate en los últimos minutos del primer tiempo impulsado por la euforia.

El segundo gol visitante estuvo a punto de llegar cuando, en el 35, Lewandowski quedó sólo ante Manuel Neuer, que reaccionó con una parada sensacional ante su compañero del Bayern Múnich.

Con su parada Neuer corrigió su propio error pues la situación se había originado con un mal despeje que había permitido que los polacos pusieran el balón en el área a vuelta de correo.

El segundo tiempo mostró un partido bastante abierto. Alemania tuvo la pelota, una gran ocasión en el 57 con un remate al poste de Götze y otra serie de llegadas, muchas veces comandadas por Ilkay Gundogan que ingresó en el 53 por Bellarabi.

Fuente Excélsior