A López Obrador no hay quien lo pare. Al menos no todavía, pues el poeta macuspano se presentó ayer con bastante éxito en la Ciudad de El Paso, donde si bien no acudieron migrantes (quién sabe si por desinterés o miedo a la migra), sí que se apersonaron muchos políticos chihuahuenses, algunos con varias vueltas de reciclaje, que buscan sumarse a este proyecto que por todos lados ya huele a hueso carnoso y vía directa para llegar al poder con la bendición tabasqueña.
La habilidad de AMLO no se cuestiona. Si lo vemos desde la perspectiva de los esperanzados pejistas, el aspirante ha sido la voz más importante de respaldo a los migrantes, en parte gracias al respaldo del sacerdote y activista Alejandro Solalinde, el defensor más visible y comprometido del país con esta causa, en parte por su astucia de reconocer el grave vacío de liderazgo que, simplemente, ha ocupado.
Los migrantes generan votos. En este momento el ex jefe de gobierno de la Ciudad de México sabe que la preocupación de muchas familias, repartidas de ambos lados de la frontera, es que echen a los suyos. Esa podría ser la razón por la que a esta causa sí se ha sumado, y no a las de personas LGBT, por ejemplo, pues considera que hay más votos en los templos que en los colectivos, y en ese caso y otro ha preferido guardar mutis. También ha preferido apoyar a sindicatos como la CNTE y el de Electricistas, sin otra razón que el oportunismo político.
Edificar un proyecto con cascajo de otros partidos es la misión de AMLO, quien con dos derrotas a cuestas (ambas basadas en el marranero de sus competidores), comprendió que el apoyo popular no se materializa en votos sin el respaldo de buenos operadores, financiadores y hasta acarreadores. Por ello es que trae cerquita a gente como Cruz Pérez Cuéllar, quien es capaz de hacer votar hasta a los muertos, la también panista Clara Torres, el empresario Rogelio Ramos; priistas como Juan Ubaldo Benavente, el ex procurador Alejandro Pariente, así como columnistas, sacerdotes, diputados, regidores, y en fin, grillos de toda especie.
Y hablando de oportunistas, ahí está la chirinola por el cambio en las actas de nacimiento, un ajuste plenamente justificado por motivos burocráticos, técnicos y hasta de sentido común, pero que ha despertado la ladradera en los sectores que aún pretenden lucrar con posturas inquisidoras y delirantes, por no decir mañosas, pues propugnan mil mentiras para alarmar a las personas mal informadas y hacerles creer que cambiar “apellido paterno” por “filiación”, va a destruir familias. Resolver problemas familiares con golpizas, como recientemente se exhibió en redes, sí que hace daño, pero ahí sí mostraron “todo su apoyo” a los golpeadores.
Obsesiones medievales en el discurso. Es curioso ver no sólo la edad, sino la trayectoria política y personal de muchos de estos “defensores de la familia”, que manipulan la información en busca de crearse una base de apoyo que les permita mantenerse en los puestos públicos y hasta académicos que ya ocupan. La Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, donde han salido más aviadores que del Escuadrón 201, es el nido de muchos de estos personajes, dedicados a impartir más doctrina que clases. Los feminicidios, la pederastia, la violencia, la miseria, para ellos no afectan a la familia. No. Son los cambios en las actas lo que nos destruye…
Javier Corral tomó postura a favor de la diversidad. Como parte de la derecha ilustrada de la que forma parte, el gobernador no puede dar la espalda a los grupos que lo apoyaron desde el altiplano, conocedores de leyes y derechos humanos, así como a varios de sus cercanos abiertamente homosexuales, e incluso su familia podría considerarse como diversa, pues sus perros ‘Greta’ y ‘Galo’ ocupan el lugar que en la familia perfecta de un panista ejemplar deberían llenar abundantes, blancos y bien peinados niños.
Blanca Gámez, líder de la bancada azul, también respalda la postura progresista, y más allá de eso aclaró que simplemente es una orden de la Suprema Corte, acatada ya en varios estados, por lo que no hay más que hablar. Colectivos LGBT como Cheros ni le mueven demasiado, saben que es una victoria ya en sus manos y no tienen que convencer a nadie más. Simplemente quieren que los dejen ser y vivir a su manera y de acuerdo con sus preferencias.
«Se trata de un derecho humano de las personas elegir de qué forma desean vivir. Como Gobernador seré respetuoso de todas las formas de pensar y sobre todo de los derechos humanos. Nosotros acataremos el estado de derecho y por supuesto no renunciamos ni claudicamos de nuestras convicciones éticas y religiosas pero un gobierno no le puede imponer sus condiciones religiosas a nadie». Así de claro fue el gobernador, y bien por él.
En el PRI hacen recuento de los daños. Ante el desastre heredado por el duartismo llaman al apoyo de las bases, esas que desde hace años ni pelan, y cuyo desprecio se ha visto en los ¿festejos? por el aniversario del partido, al cual no acudieron ni los que aún tienen nómina tricolor. El delegado del CEN, Fernando Moreno Peña, ya está midiéndole el agua a los camotes y en el mismo PRI señalan como causante de su holocausto al ex gobernador César Duarte, que convirtió en corrupción, ineptitud y derrota todo lo que encontró a su paso. Bueno, también en dinero…
Embestida contra el Peje es la estrategia, de nuevo, de esa masa que los morenistas llaman PRIAN. Causaron burlas los señalamientos de Peña Nieto quien afirmó que la oposición no está lista para gobernar, esto mientras el país se encuentra en el estado más lastimoso de las últimas décadas. En Chihuahua también el tricolor ha advertido que cualquier priista que ande de metiche en los mítines de AMLO será expulsado. No hallan cómo frenar la desbandada.
Las corruptelas de Duarte llegaron a los escritorios de Estados Unidos. Allá se ha agazapado el ballezano, según el para tratarse el fregadazo que se dio durante el turbio helicopterazo que provocó él mismo. En el Departamento de Estado de EU no sólo tienen nota de sus transas y del manto de protección que han tendido sobre él autoridades, políticos y la cúpula de su partido. El documento también habla de las inhumanas condiciones laborales de la maquila, y de un caso puntual de torturas y desapariciones que involucran al 35 batallón de infantería, acusados de haber torturado, asesinado y desaparecido a dos hombres.
Huelga de hambre tensa limpieza policiaca. El alcalde de Nuevo Casas Grandes, David Martínez Garrido, cumplió cuatro días en huelga de hambre para exigir que acabe el acuartelamiento de sus policías, sobre los cuales hay fundadas sospechas de complicidad con el crimen organizado que hierve en la región. Dicen que lo que se cuestiona no es la voluntad de sanear las policías, sino la manera autoritaria de hacerlo. ¿Cuándo un alcalde ha hecho huelga de hambre para defender a sus ciudadanos de los malandros? ¿Por qué no se negoció, planeó y ejecutó con más eficacia? El fondo de las medidas son buenos, la forma es la que se cuestiona, y las formas no han sido el fuerte del nuevo amanecer.