El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, respondió este viernes a la denuncia de hechos que el PAN realizó ante la Fiscalía General de la República (FGR) contra su hijo por presunta corrupción y tráfico de influencias.
“Ya un partido presenta una denuncia a la Fiscalía, adelante, obvio no hay nada ilegal, nada absolutamente. Pero es el escándalo, es tirarlo, porque no pueden de otra manera, y ahí están medios, periodistas, intelectuales al servicio del antiguo régimen, todos, y adelante con eso”, dijo durante su conferencia matutina.
Ayer, Acción Nacional presentó una denuncia de hechos ante la FGR y la Fiscalía Anticorrupción por presuntos actos de corrupción y tráfico de influencias, en la cual se señala a José Ramón López Beltrán, quien vivió en una casa en Houston, Texas, propiedad de un exdirectivo de Baker Hughes, empresa que tiene contratos con Petróleos Mexicanos (Pemex).
“Pedimos que se investigue el origen de los recursos de las lujosas casonas de Houston, que fueron exhibidas por los medios de comunicación y que se investigue todo lo relacionado a los contratos de las empresas proveedoras de Pemex“, exigió el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés.
Al respecto, el mandatario aseguró que él y su movimiento siempre han “salido de la calumnia ilesos”.
El líder panista acusó que las casas en Houston de José Ramón López Beltrán “desmantelan el discurso de austeridad y honestidad” que promueve el presidente López Obrador.
Previo a entregar la denuncia de hechos insistió que, de acuerdo con la información publicaron Latinus y Mexicanos Contra la Corrupción, en este hecho hubo tráfico de influencias, lo cual constituye un delito.
“El conflicto de interés y el tráfico de influencias del hijo del presidente López Obrador es evidente. Después de recibir un contrato de Pemex, la empresa agraciada le presta una mansión (…) exigimos una investigación puntual, exhaustiva y con resultados creíbles, no queremos un manto protector ni de impunidad como en otros casos”, expresó.
Baker Huges, empresa energética transnacional, reconoció que la casa en Houston, Texas, en la que vivieron López Beltrán y su esposa, Carolyn Adams Solano, perteneció a un exempleado de la firma.
La compañía afirmó que “el inmueble nunca ha sido propiedad ni administrado directa o indirectamente por Baker Hughes y aseveró que “no estuvo involucrada en la supuesta transacción”.
El jueves pasado, en el programa de Loret Capítulo 69, Latinus y MCCI revelaron que según registros de la propiedad del condado texano de Montgomery, en 2019 y 2020 el hijo del presidente y su esposa vivieron en una casa que pertenecía a Schilling, quien fue alto ejecutivo de Baker Hughes.
La investigación muestra que la compañía petrolera tiene contratos vigentes con el gobierno de López Obrador por más de 151 millones de dólares en obras para Pemex y que además, hoy vende compresores y turbinas para la nueva refinería de Dos Bocas.