Doce personas resultaron heridas, dos de ellas de gravedad, en la madrugada del lunes en un club nocturno de Londres después de ser impactadas por el lanzamiento de una sustancia «ácida», indicaron las autoridades británicas.
El incidente se produjo en Mangle, un club al noreste del centro de la capital británica donde se encontraban unas 600 personas disfrutando de un largo fin de semana feriado en Reino Unido.
Los investigadores «creen que una disputa entre dos grupos de personas» se desencadenó en el club, llevando a un hombre a pulverizar una «sustancia tóxica» sobre dos otras personas de unos veinte años, indicó Scotland Yard en un comunicado.
Estos últimos se encuentran en un estado «grave, pero estable», mientras que otras diez víctimas fueron tratadas por heridas leves, precisó la policía londinense que en un primer momento habló de «quemaduras menores».
«Aún no se ha realizado ninguna detención y la investigación continúa. Nada hace pensar que esto este relacionado a (un caso) de bandas», declaró igualmente Scotland Yard, después de haber descartado, en un primer momento, la pista terrorista.
«Una sustancia corrosiva desconocida ha sido arrojada en el club», indicó por su parte a la AFP un portavoz de los bomberos londinenses en un comunicado, precisando que los «tests PH» (de acidez) revelaron que se trataba de una «sustancia ácida».
Citando cifras de la policía, la BBC informó el mes pasado de un notable aumento de ataques con ácido en Londres durante los últimos años, con 454 casos registrados en 2016, frente a los 261 de 2015.
La congresista demócrata Ilhan Omar vuelve al centro de la polémica tras el testimonio de un conocido miembro de la comunidad somalí de Minneapolis, que afirma públicamente —por primera vez— en exclusiva para DailyMail que la diputada se casó con su hermano para facilitarle documentos y mantenerse en Estados Unidos.
El dirigente comunitario Abdihakim Osman, bien conectado con las familias somalíes instaladas en Minnesota, asegura que Omar admitió entre allegados que su segundo marido, Ahmed Elmi, era en realidad su hermano, y que el objetivo del enlace era «ayudarle a conseguir papeles para estudiar y quedarse en el país».
Osman sostiene además que, mientras esto ocurría, Omar seguía conviviendo con su primer esposo, Ahmed Hirsi, con quien había contraído matrimonio religioso en 2002.
Según su relato, el matrimonio con Elmi en 2009 se mantuvo oculto a la comunidad somalí debido a su carácter irregular: «Cuando se casó con Hirsi, fue una boda grande, con más de cien invitados. Cuando se casó con Elmi, nadie supo nada hasta que apareció el certificado matrimonial años después», afirma.
Las sospechas sobre un posible matrimonio fraudulento han acompañado a Omar desde 2016. Ella siempre se ha negado a responder preguntas directas y ha acusado a los medios de «islamofobia», pero jamás ha ofrecido una explicación coherente sobre por qué se casó civilmente con Elmi mientras seguía unida a Hirsi por la vía religiosa y mantenía una vida familiar con él.
Los datos aportados por Osman refuerzan la tesis de un matrimonio instrumental para obtener beneficios migratorios, una práctica penalizada en EE.UU. con hasta cinco años de cárcel.
La versión coincide con diversas informaciones que señalaban que, tras el enlace, Elmi accedió a ayudas educativas y documentación necesarias para estudiar en North Dakota State University, antes de regresar al Reino Unido.
Los registros muestran que: Omar se casó civilmente con Elmi en 2009. En 2012 tuvo un tercer hijo con Hirsi. En 2017 se divorció de Elmi. En 2018 se casó civilmente con Hirsi, coincidiendo con su salto a la política nacional.
Osman sostiene que la versión oficial es ficticia: «Nunca estuvieron separados. Nunca dejaron de ser marido y mujer», dice sobre Omar y Hirsi. Omar, perteneciente al ala más radical del Partido Demócrata, ha estado rodeada de escándalos en los últimos años, incluidos los derivados de su vida personal y de acusaciones de trato de favor hacia consultoras vinculadas a su campaña.
Para la influyente comunidad somalí de Minneapolis, sin embargo, el asunto del presunto matrimonio con su hermano es el episodio que más ha dañado su relación con la congresista: «Escandalizó a toda la comunidad», afirma Osman.
De momento, Omar sigue sin aclarar por qué se casó con Elmi, ni por qué recurrió a un ministro cristiano para una boda civil que ningún miembro de su comunidad conoció.