En un trágico incendio, registrado el pasado 11 de diciembre en la colonia Chihuahua 2000, el pequeño Luis Alfredo Ávila, de apenas 7 años de edad, perdió a tres hermanos y a su padre, pero además perdió la salud y debido a la inhalación de humo adquirió déficit neurológico y parálisis espástica, por lo que le fue indicada una silla de ruedas especial, misma que ayer le entregó la Secretaría de Desarrollo Social a través de la Dirección de Grupos Vulnerables.

Inquieto por el cambio de postura, ya que había permanecido en una carriola por largo tiempo, el pequeño Luis recibió con agrado los saludos de la Directora de Grupos Vulnerables, Miriam Larrieu Creel y todo su personal, con el que compartió unas galletas y múltiples sonrisas.

Por su parte, Janeth Gutiérrez, madre del menor, explicó que esta silla fue indicada por el médico del CRIT que atiende a Luis  y agradeció al Gobierno del Estado por ponerla a su alcance, ya que su situación económica no les permitiría comprarla. Visiblemente emocionada, Janeth aseguró que la silla neurológica será de gran apoyo para que Luis se siga recuperando en sus terapias de rehabilitación pulmonar, lenguaje, comunicación y estimulación múltiple sensorial.