La PGJE confirmó que al interior del centro de reclusión se torturaron, asesinaron e incineraron a personas; las cenizas fueron vertidas en el rio San Rodrigo, a la altura del Ejido el Moral
El penal de Piedras Negras se convirtió en un campo de exterminio entre los años 2011 y 2013, al menos 150 personas desaparecidas pudieron haber sido torturadas y calcinas al interior de centro penitenciario y en la masacre habrían participado reos y civiles vinculados a los Zetas.
Este día la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) obtuvo cinco órdenes de aprehensión por los delitos de desaparición forzada de personas, por diversos hechos sucedidos del mes de diciembre del año 2009 al mes de enero del año 2012, en el interior del Centro Penitenciario de la ciudad de Piedras Negras.
Los cinco sujetos son:
David Alejandro Loreto Mejorado
Francisco Javier Vélez
Santiago Peralta García
Ramón Burciaga Magallanes
Manuel Elguezabal Hernández
Lo anterior se deriva de las acciones que realiza la Subprocuraduría de Personas Desaparecidas para llegar a la verdad de los hechos ocurridos en el Centro Penitenciario de la ciudad de Piedras Negras.
Resultado de un operativo denominado ‘Búsqueda en Vida’, realizado los meses de enero y febrero del año 2014, en la Región Norte de Coahuila, que incluyó una revisión al interior del Centro Penitenciario de la ciudad de Piedras Negras, se obtuvo información de que en dicho lugar existió autogobierno dirigido por miembros de la delincuencia organizada, específicamente del grupo denominado “Los Zetas”; al realizar diversas entrevistas con los internos, se logró obtener información sobre un interno de nombre Ramón Burciaga Magallanes, y que por órdenes de este sujeto, en el interior del Centro Penitenciario se privó de la vida a varias personas y fueron incinerados sus cuerpos”, detalló la dependencia a través de un comunicado.
De acuerdo a la información dada a conocer, tras “la incineración de los cuerpos, las cenizas fueron trasladadas y vertidas en el rio San Rodrigo, a la altura del Ejido el Moral, que se encuentra ubicado en la carretera Piedras Negras-Ciudad Acuña”.
Cabe el señalar que la orden de aprehensión es por la desaparición de 7 personas, de las cuales se tiene la certeza de que fueron privadas de la vida; la investigación sigue abierta y se siguen realizando diligencias para dar con el paradero de más personas que tienen reporte de desaparición y que de acuerdo a testimonios, fueron trasladadas al Centro Penitenciario para privarlas de la vida.
En el interior del Centro Penitenciario, los miembros de la delincuencia organizada realizaban actividades de fabricación de ropa táctica y modificación de vehículos en carrocería y pintura”.
Personal de la Subprocuraduría de Personas Desaparecidas, realizó 138 entrevistas en el interior del Centro Penitenciario, de las cuales se recabaron 42 declaraciones testimoniales.
De las diversas declaraciones obtenidas, se advierte que hay más personas involucradas en los hechos, mismas que se fugaron del Centro Penitenciario en el mes de septiembre del 2012.
Las personas fugadas y que han sido recapturadas, se encuentran internas en distintos Centros Penitenciarios Federales del país, por ello, se solicitó colaboración para recabar sus declaraciones y en su momento ejercitar la acción penal correspondiente”.
Los Agentes del Ministerio Público, Peritos y los Agentes de la Policía Investigadora, adscritos a la Subprocuraduría de Personas Desaparecidas, realizaron diligencias de reconstrucción de hechos con los responsables de los actos constitutivos del delito con objeto de precisar las mecánica de los hechos.
Se realizó Inspección ministerial al interior del Centro Penitenciario, lugar en donde se recolectó diversa evidencia, misma que se envió a la Policía Federal División Científica para su análisis y una vez realizado el dictamen, se concluyó que la evidencia recolectada correspondía a fragmentos óseos, los cuales por su grado de calcinación, no se pudo determinar su origen.
Asimismo, se realizó una inspección ministerial en el río San Rodrigo, a la altura del Ejido El Moral, inspeccionándose una longitud de 1.5 kilómetros hasta la desembocadura con el río Bravo.
Excelsior