Canadá se unió este miércoles a Uruguay en el club de países donde el consumo recreativo de forma recreativa es legal.
Esto inicia con la apertura de tiendas en la Costa Atlántica, lo que le da al país una ventaja masiva en el desarrollo de un mercado de mariguana global que algunos analistas estiman en 150 mil millones de dólares.
Las primeras tiendas en vender fueron las de St. John’s, Newfoundland que abrieron a primera hora de este miércoles, seguidas de más de 100 puntos de venta y sitios web. Éste es un momento histórico para una industria que ha crecido rápidamente.
«Los ojos del mundo están puestos en Canadá y los canadienses deberían sentirse muy orgullosos, porque la gente ha estado luchando durante décadas para hacer de este momento una realidad», dijo Brendan Kennedy, director ejecutivo de Tilray, la mayor compañía de cannabis por mercado. valor.
Canadá es el segundo país del mundo en legalizar el uso recreativo a nivel nacional después de Uruguay. Como resultado, se ha convertido en el favorito de la industria mundial del cannabis. Se espera que el valor del consumo alcance los 32 mil millones de dólares para 2022, según Arcview Market Research y BDS Analytics. Mientras tanto, el mercado global podría tener un valor de 150 mil millones, según estimaciones de Roth Capital Partners.
La mariguana medicinal ha sido legal en Canadá desde 2001, pero solo han pasado unos cuatro años desde que las primeras compañías de cannabis comenzaron a cotizar en los intercambios canadienses. En ese corto tiempo, alrededor de 140 compañías de macetas se han hecho públicas en Canadá, con un valor de mercado combinado de más de 60 mil millones de dólares canadienses (48 mil millones de dólares estadounidenses).
La producción del cannabis estará a cargo de empresas privadas que operarán bajo la supervisión del Gobierno, que recibirá el 25 por ciento de los impuestos por estas ventas.
Los negocios podrán vender mariguana a mayores de 18 o 19 años, a unos 7 dólares el gramo, dependiendo de la provincia de Canadá en la que se ubiquen.
La ley, aprobada el 21 de junio pasado por el Senado canadiense, también permite que los ciudadanos puedan cultivar hasta cuatro plantas de mariguana en su casa.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.