Una semana después del terremoto que azotó a Nepal ya no esperan encontrar más supervivientes bajo los escombros de miles de viviendas en el valle de Katmandú, donde se aguarda la ayuda que ha comenzado a llegar.
“Hay pocas posibilidades de encontrar a alguien con vida”
La cifra de muertos ha rebasado los 7,000, según indicó el domingo la policía. El número de fallecidos llegó a 7,040 luego de la extracción de más cuerpos de entre los escombros, dijo Babu Kanji Giri, funcionario de la policía nacional.
Hay 14,123 personas heridas por el terremoto del 25 de abril. De ellas, 6,512 están recibiendo tratamiento en hospitales.
Organizaciones no gubernamentales aseguran que la burocracia está trabando la salida expedita de material hacia las comunidades necesitadas, mientras los organismos internacionales coordinan a todos los actores para tratar de llegar a los sectores más castigados por el sismo.
La última cifra de fallecidos es de 6,841 y la de heridos de 14,087, pero se espera que aumente el número de víctimas cuando los equipos de rescate lleguen a las zonas más remotas afectadas.
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Casas devastadas en Nepal
El listado oficial de extranjeros fallecidos contabiliza al menos 54 muertos, la mayoría de India y el resto de China, Francia, Japón, Estados Unidos, Australia o Estonia, e incluye a la española Raquel Gómez, de 47 años, fallecida en la zona de Langtang, aunque las autoridades españolas mantienen que su muerte no se debió al seísmo.
Las búsquedas para localizar a un millar de europeos, la mayoría aficionados al treking que se encontraban en las zonas del Everest y de Langtang cuando se produjo el temblor, proseguían el sábado.
«Están desaparecidos pero no sabemos exactamente su situación», precisó Rensje Teerink, embajadora del la UE Nepal, a los periodistas en Katmandú.
El Gobierno nepalí afirmó que hay «escasas posibilidades» de encontrar supervivientes bajo los escombros, una valoración que confirma que Nepal ha entrado en una nueva fase de la tragedia.
«Ha pasado ya una semana, por lo que hay pocas posibilidades de encontrar a alguien con vida» bajo los escombros, declaró a Efe el portavoz del Ministerio del Interior, Laxmi Prasad Dhakal, quien añadió que aún así los equipos de rescate no han cesado la búsqueda.
Una joven de 24 años rescatada durante la noche del jueves por equipos de Nepal, Israel y Noruega bajo los escombros de un edificio en Katmandú tras permanecer 128 horas atrapada es hasta el momento el último milagro en la lista de supervivientes imposibles.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que al menos el 95% de los centros de salud de los 12 distritos golpeados por el terremoto en Nepal han quedado muy dañados y un 30% de los grandes hospitales de esa área están inservibles.
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Heridos en Nepal.
La urgencia de los supervivientes
Supervivientes de las áreas más remotas de Nepal afectadas por el terremoto que devastó el país hace una semana reclaman con urgencia tiendas y lonas para guarecerse, después de que sus casas resultaran destruidas o seriamente dañadas.
En numerosos lugares, los supervivientes esperaban aún alimentos y ser trasladados a un lugar seguro.
«En muchas zonas, la gente no ha tenido acceso a la ayuda y es normal que estén enfadados», admitió Rameshwor Dangal, un responsable de la agencia nacional de gestión de catástrofes, a laAFP.
«Estimamos que en torno a 1,000 personas necesitas ser socorridas en las zonas de Rasuwa y Sindhupalchowk», añadió.
Katmandú a unos días del devastador terremoto
En la capital, decenas de miles de supervivientes seguían durmiendo al raso una semana después de la catástrofe.
«No vivimos en esta tienda de campaña por gusto. Estamos aquí porque no tenemos dónde ir», dijo Dhiraj Thakur, refugiado desde hace una semana en la vasta explanada de Tundi Khel Maidan.
El Gobierno nepalí lanzó una web en la que representantes de áreas golpeadas por el terremoto revelan la situación general de la zona en la que se hallan y piden especialmente tiendas y lonas.
El Consorcio de Reducción de Riesgos en Nepal, una entidad en la que participan organismos de Naciones Unidas, calcula que el terremoto ha generado alrededor de 2.8 millones de desplazados internos (la población del país es de 28 millones personas).
Además, la misma fuente señaló que el sismo destruyó unas 160,786 casas y otras 143,673 resultaron dañadas en el país del Himalaya.
«Necesitamos unas 5,000 tiendas. 6,000 familias perdieron sus casas y aún no recibieron ayuda. Construimos estructuras temporales para guarecernos con lo que hemos podido, pero hacen falta tiendas», afirmó a Efe un portavoz de la ONG educativa Teach for Nepal.
Miembros de esta organización no gubernamental buscan ayuda para los habitantes del distrito de Sindhupalchowk, al norte de Katmandú, aunque saben lo «difícil» que es que la reciban, pues «todo el mundo está preguntando por tiendas».
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Es urgente la ayuda en Nepal.
Por su parte, la Unicef exhortó a actuar con rapidez para evitar la aparición de epidemias entre los 1.7 millones de personas que viven en las zonas más afectadas, a pocas semanas de la llegada del monzón.
Unicef dio la voz de alarma ante la situación de miles de niños sin techo cuya salud «está en juego», muy marcados por la tragedia y sin acceso a agua potable o alimentos.
Rownad Khan, adjunto al representante del organismo de la ONU para la infancia, estimó que hay un margen de tiempo «corto» para poner en marcha medidas de prevención de enfermedades infecciosas antes de la llegada del monzón, que con su humedad podría agravar el peligro.
Sobrevivientes se manifiestan por la falta de ayuda mientras autoridades no se dan abasto por la situación.
Un bebé nació en una tienda de campaña
Y después de casi una semana de noticias desoladoras de Nepal, el viernes hubo un pequeño pero hermoso momento de alegría.
Un joven mujer dio a luz a una niña en uno de los hospitales de campaña instalados por naciones extranjeras para brindar ayuda al país.
Tanto la madre como la bebé, cuyo nombre no se ha dado a conocer, están en buenas condiciones.
La ayuda no ha llegado a algunos pueblos aislados, y una responsable humanitaria pidió el sábado que se envíen más helicópteros para llevar auxilio a los lugares más lejanos de esta nación del Himalaya.
Muchas carreteras de montaña, traicioneras en el mejor de los casos, seguían bloqueadas por deslaves, lo que hacía extremadamente difícil el acceso para los camiones de suministros a las poblaciones más altas del Himalaya.
«Definitivamente necesitamos más helicópteros», dijo a The Associated Press Ertharin Cousin, directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, en la localidad de Majuwa, en el golpeado distrito de Gorkha. Las agencias humanitarias emplean Majuwa como base de operaciones para llevar suministros a las zonas más elevadas. «Incluso luego de siete días, esto se considera como el mismo principio porque aún hay gente a la que no hemos llegado. Así que necesitamos helicópteros para llegar a ellos».
«Éste es uno de los lugares más pobres de la Tierra. Si la comunidad global da la espalda, la gente de este país no recibirá la asistencia que necesitan para reconstruir sus vidas», dijo.
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La desesperación invade a los sobrevivientes en Nepal.
Una semana después del devastador terremoto, la vida empieza a volver a la normalidad, y la gente visitó los templos en el primer sábado desde el desastre, el día de la semana que suele reservarse para ello.
En este momento, señaló, el refugio es una prioridad más urgente que los alimentos.
La población de Katmandú ha comenzado a regresar a las casas que no fueron destruidas o quedaron seriamente dañadas por el terremoto.
Un vecino del área de Kalanki que decidió volver a su vivienda, Goma Sherestha, afirmó que lo hizo porque «se ha vuelto también arriesgado vivir en tiendas por motivos sanitarios. Muchos están enfermando», recoge hoy el diario local Kantipur.
Los muertos en Nepal superan los 5 mil y los heridos 10 mil, la ayuda internacional no ha sido suficiente.
A la hora de decidir o no regresar a las casas, el ingeniero civil Khagendra Bhurtel dijo a Kantipur que la gente puede volver «sin miedo si no ven en ellas defectos estructurales», aunque aclaró que deberán consultar a expertos si hay grietas visibles.
El terremoto de 7.8 grados ha sido el de mayor magnitud en Nepal en 80 años y el peor en la región en una década desde que en 2005 otro sismo ocasionara más de 84,000 muertos en Cachemira.
©Univision.com y Agencias