Uno más, un vocero más ocupará la oficina de Comunicación Social durante lo que queda del sexenio de César Duarte. Se trata de Sergio Belmonte Almeida, quien había estado como representante del Estado en la zona norte del estado, en particular en Juárez, donde se había venido desempeñando.

Nos cuentan que no se trató de un pedradón contra Federico Guevara, a quien le regalaron el Registro Civil para que no sienta frío en lo que queda del sexenio, sino de un ajuste estratégico con miras a fortalecer, desde Palacio, la estrategia de Enrique Serrano rumbo a la gubernatura, con un personaje que conoce bien todo lo relacionado con la frontera, donde concentrarán sus esfuerzos prioritarios pues uno de cada tres chihuahuenses vive en esa región.

Así sigue la rotación interna del grupo Duartista, pues Ricardo Yáñez salió del Registro Civil para irse directito a Educación, la cual había quedado decapitada (otros prefieren decirle acéfala) tras la breve aventura electoral de Marcelo González Tachiquín, quien aún sigue jugando al misterio, pero lo más probable es que aguante su proyecto para mejores tiempos, pues sus posibilidades, de momento, parecen agotadas.

Pero Ricardo Yáñez no la tiene fácil. Recibe una SECyD desmantelada por el caótico manejo que se le ha dado a la educación en Chihuahua, pues más que procurar fortalecer este rubro, la dependencia se dedicó a ser nido de grillos y su personal está más distraído en las campañas que en la chamba que tiene que hacer.

Para muestra está el plantón que le armaron ayer las estudiantes de la Normal de Saucillo, quienes exigen que se cumplan los acuerdos firmados por Tachiquín, pues el efímero José Salcido ni una hojeada les dio, y las muchachas siguen luchando porque su centro de estudio no sea desmantelado por completo, pues ya poco falta.

Las estudiantes cerraron el tráfico y fueron rodeadas de agentes encapuchados y fuertemente armados, pero no se asustaron. Luego hubo quien puso el grito en el cielo pues en estos casos a buena parte del gabinete y hasta de los medios les da por acordarse de los pobres automovilistas, que deben soportar baches, fotomultas y atracos oficiales de todo tipo, pero lo que de verdad indigna es que les cierren el paso y lleguen 10 minutos más tarde a sus destinos.

Pero ya que andamos con el asunto de las candidaturas, ayer corrió de la versión de arriba abajo y de un lado a otro, de que Corral siempre se bajaba de la contienda. No es la primera ni la última que se dice esto, desde que empezó la carrera todo mundo lo quiere bajar, y de alguna manera él ha dado pie, pero siempre sí quiere.

Fue por medio de Facebook que dijo, conciso: “Tal y como lo informé hace una semana, decidí participar en el proceso de selección del candidato del PAN a la gubernatura de Chihuahua. Decidí someterme al ejercicio de medición y valoración por parte de los órganos del Partido. Continúo en este proceso; respetaré y apoyaré sin reserva alguna la decisión que tome la Comisión Permanente”. Parece que fue una jugada más de ‘fuego amigo’, aunque otros afirman que la bola vino desde Palacio, aunque bien podría estar Corral haciéndose del rogar, lo más probable.

De paso, cabe mencionar que el aún senador está con la campaña a tope. Incluso su imagen de perfil muestra sus mejores momentos, mediante un collage que muestra sus mejores momentos, rodeado de personalidades que van desde su esposa y santones del partido, hasta gente de la farándula, la cultura y el medio académico, dando muestra que es un político reconocido en altos círculos, aunque en su pueblo pocos lo conozcan.

Todo apunta, dicen a que la jugada de voy y no voy obedece a un jaloneo en el que el legislador por fin habría resultado el ganón de la interna, pues los demás apuntados tienen o cola que les pisen o apoyos insuficientes para dar la pelea digna. Aquí se jugará el PAN su futuro, entre cerrar filas y hacer un papel decoroso en las elecciones (muy difícil que ganen) o atomizarse y desperdigar las pocas fuerzas azules que quedan.

Mientras, la Comisión Permanente del Consejo Nacional del PAN, quedó de sesionar ayer a las 11 am para parir por fin candidato, pero no hubo Quorum, así que será hasta el próximo miércoles 3 de febrero que se tendrá candidato, y aunque pinta que será Corral, la gente de Juan Blanco y Carlos Borruel no quedó nada contenta, y hasta acusan de compló en su contra.

El que va a paso firme es José Luis Barraza, quien tiene aún 20 días para juntar firmas y parece que ahí la lleva sin demasiados problemas, pues ya casi alcanza la cuota mínima para postularse y una vez superada le echará ganas para acercarse a la aspiracional de 200 mil, nada más para mostrar músculo.

Esto es una ventaja para Barraza, pues la gente que firma en cierta medida ya va amarrando su apoyo para cierto candidato, lo cual es una de las pocas ventajas que tienen los independientes ante la serie de candados que deben arrastrar, y la competencia sucia de un rival que cuenta con el respaldo de todo el aparato gubernamental y voto duro.

Pero ‘Chacho’ tendrá visita, y nada grata. Se trata de Andrés Manuel López Obrador, quien recorrerá los principales municipios del estado en una amplia gira de cinco días, dizque él para fortalecer una plataforma socioecónomica de Chihuahua, pero la verdad es que viene a designar candidatos, a regañar a uno que otro y a hacerle ruido a ‘Chacho’, pues tienen sus cuentas pendientes y muy personales.